Farmacéuticos

Un accidente de tráfico me ha tenido 20 días inmovilizado en el Hospital U.V. Macarena y me tendrá un mes más de reposo en mi casa. Dicho accidente me ha permitido, por primera vez, experimentar personalmente las prestaciones sanitarias de nuestro Servicio Andaluz de Salud. Por ser la primera vez que he estado ingresado en un hospital no puedo hacer comparaciones, pero le manifiesto que la atención hospitalaria que he recibido he de calificarla globalmente, si no de sobresaliente sí de notablemente aceptable, especialmente la atención médica y de enfermería, los cuidados de higiene y la comida, abundante y siempre puntual. En otros aspectos, sin embargo, sí cabría mejorar, por ejemplo: en las salas de urgencia y de observación, siempre abarrotadas de camillas y de familiares, en la limpieza de las habitaciones que, tal vez por estar privatizada está poco controlada y es muy deficiente, en la escasez de personal y de lencería en los fines de semana, así como en el mobiliario de las salas que, por viejo, había ya que renovarlo. Pero, sobre todo, en la planta del H.V. Macarena donde estuve hospitalizado se echa absolutamente en falta el ambiente tranquilo y silencioso propio de un Hospital. Para conseguirlo habría que organizar de otra forma el acceso de familiares y visitas. Estos aspectos son fáciles de corregir, con ello aumentaría el grado de satisfacción de los usuarios que, en general, es bastante alto, y mejoraría la imagen de nuestro Servicio Público de Salud, a veces tan injustamente vilipendiado. Por otro lado, este accidente me permite reclamar a nuestro Ayuntamiento se ponga un semáforo en el lugar del suceso: la confluencia de la Avenida de China, en Sevilla Este, con el tramo de la carretera de circunvalación que lleva al mercadillo de Alcosa y enlaza con la Avenida de Emilio Lemos. Esta confluencia está señalizada con un STOP, con escasa visibilidad. El tráfico procedente del Parque Alcosa lo ocultan parcialmente unos setos, la barandilla del puente del arroyo Ranilla y el repecho cuesta abajo y en curva de la misma vía. Este motivo hace de esta confluencia un punto conflictivo donde han ocurrido, además del mío, varios accidentes más.- Antonio Moreno de la Fuente. Sevilla.

Ahora entiendo porque sigue desforestándose la selva del Amazonas, o porque hay países que continúan asesinando ballenas. Es por el afán de llevar lo productivo hasta el límite de las posibilidades del medio natural. En la sierra de Albayete, en la Subbética cordobesa, existe un denso bosque mediterráneo. Un nuevo propietario decide hacer "productivo lo improductivo" y decide poner olivos donde antes no los había, en unos terrenos pedregosos, con pendientes elevadas y con malos accesos. ¿Es lógico que la UE penalice a España por el exceso de producción de aceite y a su vez continúen plantando olivos? Se sigue plantando olivar a costa de nuestra riqueza natural. Unas plantaciones son ilegales, como las de la sierra de Albayate, otras como en el aso de La pedriza, en Priego, tienen el beneplácito de la Consejería de Medio Ambiente? Gracias a la Ley Forestal Andaluza nuestros bosques están tan indefensos como en la época de la Desamortización. Eso sí, con la diferencia de que ya no quedan grandes extensiones de monte, sino pequeñas islas ahogadas en un mar de olivos, como es el caso de las sierras Subbéticas. Esperemos que nuestros hijos puedan conocer la naturaleza de nuestras sierras. Algo más que llevar los productivo hasta el límite.- Victoria E. Muñoz Ordóñez. Priego. Córdoba.