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Detenidos 53 implicados en una red de venta de productos prohibidos para engordar vacuno

Las autoridades han inmovilizado 3.000 terneros destinados al consumo humano

La Brigada de Delincuencia Económica de la policía ha puesto a disposición judicial a 53 personas en una investigación que ha supuesto la desarticulación de una red de introducción en España y posterior distribución de productos prohibidos para el engorde de ganado vacuno destinado al consumo humano. Los dos cerebros de la trama son un distribuidor de Madrid y otro de Lorca (Murcia). Entre los implicados hay un veterinario de la Junta de Andalucía destinado en Cádiz y dos auxiliares de vuelo de Iberia. Uno de éstos fue detenido al llegar de Miami con 30.000 comprimidos de Synovex Plus.

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Las investigaciones se iniciaron a finales del año pasado, cuando la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid descubrió en un matadero dos partidas de terneros, procedentes de Toledo y Segovia, con implantes hormonales. En concreto se trataba de pastillas que estimulan el engorde -introducidas bajo la piel del animal- prohibidas por la UE. La Comunidad de Madrid, además de inmovilizar y destruir esa carne, denunció ante la policía los hechos por un supuesto delito contra la salud pública.El Grupo de Consumo de la Brigada de Delincuencia Económica realizó pesquisas durante varios meses para determinar el origen de los productos prohibidos. Los agentes averiguaron que los implantes de pastillas procedían de Estados Unidos, y las sustancias inyectables, de México. Otros productos, como la somatotropina bovina (BST), utilizada ilegalmente para el estímulo de producción de leche, tenían su origen en Corea del Sur y eran introducidos en España a través de México y Estonia. Otras sustancias para el engorde ilegal fueron remitidas desde Argentina.

Según la Dirección General de la Policía, uno de los canales de introducción de comprimidos lo constituían dos auxiliares de vuelo -una mujer y un hombre- de la compañía aérea Iberia. Ambos solían volar con frecuencia a Miami (Florida), donde es posible adquirir los productos a razón de tres dólares por dosis, y posteriormente los entregaban a E. A.M. Éste, a su vez, los distribuía entre comercios dedicados a la venta de productos zoosanitarios y ganaderos. El citado distribuidor adquiría supuestamente otros productos en Francia y los introducía en España como mercancía comunitaria.

El auxiliar de vuelo de Iberia fue detenido precisamente cuando regresaba de Estados Unidos con 30.000 comprimidos de Synovex Plus, cantidad suficiente para administrar 3.000 dosis para terneros. El Synovex Plus es una compuesto de benzoato de estradiol y acetato de trembolona válido para el engorde artificial del vacuno a través de una potente acción anabolizante.

La policía ha comprobado que la red operaba en Albacete, Alicante, Asturias, Barcelona, Cádiz, Cantabria, Cuenca, Ferrol, Girona, Lleida, Madrid, Murcia, Segovia, Sevilla, Toledo, Valladolid, Zamora y Zaragoza.

En el curso de la operación, la policía ha registrado 33 domicilios, locales comerciales y explotaciones ganaderas, además de poner a 53 personas a disposición del juez. Éste ha decretado el secreto de las actuaciones.

Los investigadores han constatado que los ganaderos implicados han ido variando de método para intentar ocultar su delito a los veterinarios y los servicios sanitarios oficiales. De esta forma, inicialmente colocaban los implantes bajo la piel del animal -en las orejas o en el nacimiento del rabo- para que la sustancia fuera absorbida lentamente a lo largo de un periodo de 30 días.

Más tarde decidieron colocar las pastillas en otras zonas de la res -bajo las pezuñas o en el cuello- ante la creencia de que así era más difícil que los servicios sanitarios detectaran las sustancias prohibidas. "Pero se les escapó alguna partida de animales antes de que hubieran acabado de metabolizar las sustancias, y eso hizo saltar las alarmas", explicó un policía.

Además de haber sido inmovilizados 3.000 terneros para su análisis, los agentes del Grupo de Consumo se han incautado de 30.000 comprimidos de Synovex Plus, 4.260 dosis de BST (somatotropina bovina) -que es una hormona sintética del crecimiento-, 54 pistolas y agujas implantadoras de Synovex y BST, tres kilos de un compuesto de prednisolona y dexametasona, siete frascos de nandrolona, siete frascos de testosterona y seis frascos de medroxiprogesterona.

Donde se han practicado más detenciones ha sido en Madrid (nueve), Lleida y Toledo (siete en cada provincia), Cádiz (seis) y Albacete (cuatro). También ha habido arrestos en otras 13 provincias.

Felipe Vilas, director general de Salud Pública de la Comunidad de Madrid, aseguró ayer que las sustancias decomisadas no son de las más peligrosas para el hombre. "Habría que ingerir dosis muy elevadas para que produjeran efectos en el ser humano. Pero la Unión Europea las tiene prohibidas, ¿y por qué vamos a correr riesgos?".

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