El PP desafía a los socialistas a que promuevan el cambio de las leyes fiscales

Los dirigentes del PP se reafirman en que los comportamientos del ministro de Industria y portavoz del Gobierno, Josep Piqué, siempre se han ajustado a las leyes que aprobaron en el pasado los Gobiernos del PSOE. En este sentido, apuntan que están esperando que los socialistas, si están en contra, propongan la reforma de alguna de esas normas que han beneficiado fiscalmente a Piqué. No obstante, auguran que no promoverán dichas modificaciones legales porque también disfrutan de esos privilegios fiscales relevantes dirigentes del PSOE.En el PP mantienen que si el PSOE se ratifica en denunciar ante la Agencia Tributaria esos posibles beneficios de Piqué, esperarán al resultado de las indagaciones de los inspectores para conocer si el ministro tiene que variar el modo en que gestiona ahora su patrimonio. Un dirigente del PP aseguró que será entonces cuando el ministro "regularizará" su situación. Y precisó que si no lo ha hecho antes ha sido porque creía que era legal y porque cuando adquirió su residencia de vacaciones por el sistema de leasing nunca pensó que podía llegar a ser ministro e iba a ser examinado con lupa.

Piqué es uno de los miembros del Ejecutivo de José María Aznar que tan sólo ha realizado una declaración de actividades y patrimonio, en este caso la de altos cargos de la Administración. Los dirigentes del PP electos, diputados, senadores o candidatos municipales y autonómicos, tienen la obligación de tramitar otra similar en el partido, que Piqué no ha ofrecido porque aún no se ha sometido a ningún veredicto de las urnas. Tampoco ha rellenado la declaración que entregan en el Congreso los parlamentarios porque no es diputado. Aunque en el PP asumen como un error del ministro que se haya dedicado a rebatir, personalmente o por escrito, cada acusación de irregularidades en la concesión de subvenciones del Ministerio de Industria, la primera reacción de la dirección del PP será la de prestar más apoyo a Piqué que el suministrado hasta ahora.

Fue el propio responsable de Industria el que solicitó ayuda a su amigo Javier Arenas, secretario general del PP, cuando observó que con sus "alardes de transparencia" sobre su situación económica se le abrían cada vez más frentes.