Generalitat y municipios fracasan en alcanzar un acuerdo sobre el futuro del transporte público

Tal como era de prever, no hubo acuerdo, y la aprobación del plan de transporte público para el área metropolitana de Barcelona deberá esperar. La reunión de la Autoridad del Transporte Metropolitano (ATM) no sirvió para que la Generalitat y los municipios, encabezados por el Ayuntamiento de Barcelona, acercaran sus posiciones, y la aprobación del Plan Director de Infraestructuras 2001-2010 quedó sobre la mesa. Los municipios, sin embargo, arrrancaron el compromiso de que los técnicos de la ATM estudien su propuesta, mucho más amplia que la de esta entidad.

Las propuestas de transporte público que propugnan el Gobierno catalán y los municipios difieren básicamente en el modelo y algo menos en el sistema de financiación. Así, mientras el modelo municipal hace hincapié en el sistema de metro, con la construcción de 72 kilómetros de metro y de Ferrocarrils de la Generalitat y 26 kilómetros de tranvías, la Administración autonómica da más relevancia al transporte en superficie y propone 70 kilómetros de tranvía y 47 de metro, de los que 14 se proyectan para después del 2010. La diferencia entre un modelo y otro es de más de 300.000 millones de pesetas. Así, mientras que el plan de la Generalitat supone un desembolso de 240.000 millones, la propuesta municipal requeriría una inversión de 600.000 millones. A la hora de hablar de dinero aparece el desacuerdo en la financiación: la Administración autonómica plantea el desembolso en 10 años; los municipios, en el doble de tiempo porque así, argumentan, se podría conjugar la diferencia económica entre ambas propuestas, de manera que la inversión anual sería la misma (unos 24.000 millones al año). El mayor coste de la propuesta municipal se debe también a que el plan que defienden las administraciones locales plantea la llegada del metro al aeropuerto y a los polígonos industriales de Pedrosa y Zona Franca. Los municipios consideran que estos trazados podrían ser financiados con los fondos de cohesión europeos, de manera que, a la postre, la diferencia económica con el plan de la Generalitat también sería menor. Para los municipios también es indiscutible que el plan de transporte metropolitano traspase la línea natural del Llobregat, algo que no prevé el documento presentado por la ATM. En cambio, el asunto del tren de alta velocidad, aseguran, debería quedar fuera del plan de transporte metropolitano. Así las cosas, la ATM decidió ayer encargar a la comisión técnica el estudio "de aquellos elementos objetos de debate"; es decir, el plan municipal. Del mismo modo, las comisiones jurídica y económica de la ATM deberán presentar un informe de las posibilidades de financiación y ejecución del PDI 2001-2010. Las conclusiones deberán traducirse en una propuesta que se debatirá en una nueva sesión que, en todo caso, se celebrará más allá del mes de abril. El director general de Transportes de la Generalitat, Enric Ticó, advirtió que el plan elaborado por los ayuntamientos no gozará de privilegios a la hora de ser estudiado. "Nuestra propuesta es ambiciosa pero realista en las necesidades", aseguró el primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Barcelona, Xavier Casas. Casas reconoció el trabajo realizado en el seno de la ATM: "Partimos de un documento francamente positivo". Pero también añadió que el plan que defienden los municipios persigue mejorar dicho documento "para dar satisfacción a las necesidades objetivas de movilidad para los próximos años".