TV-3 reduce su presencia en Vía Digital y se alía con Retevisión

"Somos la televisión de un país pequeño y debemos jugar todas las cartas". Jordi Vilajoana, director general de la Corporación Catalana de Radio y Televisión -que gestiona TV-3-, justificó así ayer, en el Parlamento autonómico, la necesidad de mantenerse en Vía Digital, aún reduciendo su participación en ella al 2%; al mismo tiempo que se alía con Retevisión para concursar al nuevo operador de televisión digital terrestre.

Vilajoana explicó la política de alianzas de TV-3 en respuesta a preguntas de diputados del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC) y de Iniciativa per Catalunya-Verds (IC-V), planteadas en la comisión parlamentaria de control de la Corporación Catalana de Radio y Televisión.El socialista Josep Maria Carbonell reprochó al director general su empeño en mantener a TV-3 en Vía Digital, una plataforma que "pierde dinero y no tira", y cuestionó la estrategia de permanecer en ella junto con Telefónica al mismo tiempo que se pretende participar con Retevisión en el futuro operador que emitirá a través del sistema digital terrestre. En esta última sociedad, la participación no será directamente de TV-3, sino de la productora Media Park, en la que la televisión pública catalana cadena participa con un 17,6% y de la cual Vilajoana es presidente.

Jordi Guillot, diputado de IC-V, reclamó del director general de TV-3 que rescate los 2.750 millones de pesetas invertidos por la televisión catalana en Vía Digital y los destine a producción propia.

Llevarse bien con todos

Vilajoana respondió a ambos con la defensa de una política de buen entendimiento con todas las plataformas. Y negó que sea incongruente estar aliado con Telefónica y con Retevisión al mismo tiempo. Respecto al proyecto de Media Park de concurrir con Retevisión a una licencia de televisión digital terrestre, Vilajoana añadió que en estos momentos la productora -en la que también participa el grupo de empresarios catalanes Equip (42%), la compañía eléctrica Iberdrola (30%) , la multinacional Philips (5,2%) y Antena 3 (5%)- no sólo negocia su incorporación a la plataforma, sino que también pretende que ésta tenga su sede social en Barcelona, al igual que ya ocurre con Retevisión.

Las alianzas, según el director general, aseguran la presencia de TV-3 como productor de contenidos para todas las plataformas. Y suministrar canales es el principal objetivo de la cadena autonómica, que no se alía por razones económicas, aseguró Vilajoana, sino por otros dos motivos: fomentar la industria audiovisual catalana y difundir el idioma catalán.

En esta misma línea argumental, Vilajoana recordó que TV-3 se ha aliado con los principales operadores audiovisuales: participa como accionista en Audiovisual Sport, la entidad que reúne los derechos audiovisuales del fútbol español y en la que se encuentra con socios como Telefónica y Sogecable; es accionista de Vía Digital; y también suministra contenidos a Canal Satélite Digital.

En cuanto a su permanencia en Vía Digital, Vilajoana confirmó en el Parlamento que la televisión pública catalana no acudirá a la ampliación de capital abierta. Piensa mantenerse en ella, aunque lógicamente con menos participación: bajará del 5% actual hasta, aproximadamente, el 2%.

Respuesta a Bruselas

Otro de los asuntos que abordó ayer la comisión de control de TV-3 fue el del modelo de financiación de la cadena. Vilajoana anunció que esta misma semana ha enviado al Departamento de Economía y Finanzas de la Generalitat, para que lo tramite al Gobierno, las alegaciones de la televisión autonómica a las explicaciones pedidas por Bruselas acerca del sistema de financiación mixto -publicidad y subvención- de las televisiones públicas.

Vilajoana cree plenamente justificado recibir ayudas públicas porque el actual sistema se aplica desde la creación de TV-3, en 1983, antes de la entrada de España en la Unión Europea. Además, presta un servicio público porque emite en catalán, "una lengua protegida por la Constitución". Y defiende la financiación mixta, con ingresos comerciales más subvención, como la fórmula ideal para no tener deuda.

El endeudamiento a largo y corto plazo de TV-3 asciende a unos 70.000 millones de pesetas. Vilajoana aseguró que la deuda se ha acumulado porque desde hace cuatro años la Generalitat les avala el endeudamiento en lugar de darle subvenciones en dinero contante. Según el director general, con 14.000 millones de pesetas de subvención al año "yo haría una televisión sin déficit".