El PNV está dispuesto a revisar el modelo D si se comprueba que los escolares no aprenden castellano

VIENE DE LA PÁGINA 1 PNV y EA se apoyaron en una enmienda a la totalidad planteada por Euskal Herritarrok -a la que añadieron otro punto transaccionado- para dar un giro al debate planteado por la oposición. Así, la proposición aprobada por el pleno de la Cámara recuerda que el objetivo de los modelos lingüísticos es garantizar el derecho del alumno a finalizar la educación obligatoria sabiendo euskera y castellano e insta al Gobierno a revisar la enseñanza en las dos lenguas por si fuera necesario acomodarla a la realidad cambiante. El popular Iñaki Oyarzabal no ahorró críticas al Gobierno por su "pasividad" ante las campañas contra el modelo A. "La enseñanza en castellano", señaló, "soporta en silencio las descalificaciones que el nacionalismo le lanza todos los años. Los nacionalistas otorgan el carné de buen vasco o mal vasco en función de saber euskera o desconocer el idioma. La política seguida por el Gobierno nacionalista ha sido muy dañina para el modelo A; ha dado cobertura a los que hacen el juego sucio con las amenazas", dijo. El portavoz del PNV en el debate, Txomin Aurrekoetxea, intentó apaciguar la discusión, pero no lo consiguió. "El euskera", dijo, "no pertenece a los nacionalistas, ni al Gobierno, ni al PNV. El euskera es de todos los vascos, de todos los partidos y si algo le perjudica son esas campañas promovidas por Euskal Herrian Euskaraz. Los tres modelos de enseñanza son útiles". En este tono conciliador, Aurrekoetxea incluso apuntó la posibilidad de revisar los modelos A y D (enseñanza en euskera con el castellano como asignatura) si no son aptos para que los alumnos aprendan correctamente el euskera y el castellano, respectivamente. "El objetivo", incidió, "es que al final de los estudios los escolares puedan expresarse en las dos lenguas. Si cuando un alumno concluye sus estudios en modelo D no sabe expresarse en castellano, habrá que revisarlo", dijo. La parlamentaria de EH Aurkene Astibia recalcó la idea que de los modelos linguísticos deben situarse por encima de las "presiones españolistas". El representante de Izquierda Unida, Javier Madrazo, se desmarcó de las propuestas de los dos grupos por entender que "los nacionalistas buscan que la sociedad sea exclusivamente vascoparlante y PP, PSE y UA sólo quieren que los ciudadanos sean castellanoparlantes".