Maragall reclama al Gobierno medidas de protección y fomento de la lengua catalana
El candidato socialista a la presidencia de la Generalitat, Pasqual Maragall, reclamó ayer al Gobierno que proteja y fomente el catalán. A su juicio, si el Ejecutivo central compartiera esa tarea con la Generalitat, contribuiría a que ésta fuera "menos puntillosa y menos molesta en la formulación de las leyes de defensa" de la lengua. Maragall hizo esta petición durante una conferencia que pronuncio en la Universidad Pompeu Fabra (UPF), en un día en que llovieron las reacciones políticas al decreto del Gobierno catalán que establece cuotas lingüísticas en el cine.
Coincidiendo con el primer año de la ley del catalán y con la polémica que ha levantado la inminente aplicación del decreto que establece cuotas lingüísticas en el cine, el ex alcalde de Barcelona defendió la necesidad de que "el Estado español vaya más allá de las declaraciones sobre la cooficialidad del catalán y lo reconozca como un idioma que proteger". Por ejemplo, especificó, promulgando leyes a este respecto. La reivindicación de Maragall está en la línea de la expresada el jueves por el número dos de la Generalitat, Xavier Trias, quien consideró que sería "fantástico" y también "lógico" que el Gobierno ayudara a la Generalitat a negociar con las distribuidoras norteamericanas, que han recurrido contra el decreto de catalanización del cine. El presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, matizó ayer las declaraciones de su consejero de la Presidencia al asegurar que el Ejecutivo catalán no debe pedir la intervención del Gobierno, sino que es éste el que habría de salir automáticamente en defensa de la aplicación de las leyes constitucionales. Pujol explicó que el jueves tuvo la ocasión de departir con el nuevo ministro de Educación y Cultura, Mariano Rajoy, aunque no trataron de este asunto. El ministerio declinó ayer pronunciarse sobre las manifestaciones de los dirigentes políticos catalanes. Quien sí las contestó fue el presidente del PP de Cataluña, Alberto Fernández Díaz. Éste consideró que la petición de Trias "se contradice con los planteamientos de CiU de no aceptar injerencia alguna del Gobierno en el debate lingüístico catalán". Fernández Díaz calificó de "restrictivo" el decreto y exigió que la Generalitat lo "sustituya por medidas incentivadoras" del uso del catalán. El punto de vista contrario lo expresaron los independentistas del Partit per la Independència (PI). Su presidente, Àngel Colom, anunció que, a partir de la próxima semana, repartirán 50.000 postales con un texto a favor del cine en catalán ante las salas que exhiban filmes distribuidos por las multinacionales contrarias al decreto, con el objetivo de que los espectadores las envíen por correo a las citadas empresas. El PI solicitará asimismo la comparecencia en el Parlament del consejero de Cultura, Joan Maria Pujals, para que explique "por qué han ido tan mal los contactos y no se ha parado el recurso". El presidente de Iniciativa per Catalunya-Verds, Rafael Ribó, propuso la convocatoria urgente de la ponencia parlamentaria que discutió la ley del catalán para que trate del rechazo del sector al decreto. Ribó acusó al Gobierno de Pujol de "pasividad", por retrasar las negociaciones con la industria, y a ésta de adoptar "una actitud intolerable".
