Irún convierte un caserío en un centro para niños inadaptados
Diez niños con graves problemas de adaptación e integración social y familiar, que presentan un alto grado de agresividad y por ello su convivencia con otros adolescentes resulta problemática, serán alojados en un caserío de Irún que ha sido transformado en un centro asistencial, según adelantó ayer el diputado guipuzcoano de Servicios Sociales, Luis María Bandrés. El plan integral de atención a la infancia y juventud en desprotección social, elaborado hace un año por la Diputación de Guipúzcoa, establece la necesidad de emprender actuaciones específicas para los niños que sufren problemas especiales de comportamiento. En colaboración de la Facultad de Psicología de la UPV, el ejecutivo foral ha decidido abrir un centro de acogida de estos menores -con edades entre 14 y 16 años- que requieren un tratamiento asistencial diferenciado. El consejo de diputados ha aprobado esta semana la compra de un caserío, en el barrio Lapice de Irún, de 414 metros cuadrados en tres plantas y 10.000 metros cuadrados de terreno para alojar a estos adolescentes conflictivos. El caserío Azpilicueta tendrá capacidad para 12 plazas. El Departamento de Servicios Sociales tiene ya una lista de una decena de niños con problemas sociales o pertenecientes a familias desestructuradas, algunos con trastornos psiquiátricos, que se someterán a este programa en el caserío Azpilicueta. Están catalogados como personas con "una necesidad prioritaria" por su situación de desprotección. A falta de convocar un concurso para adjudicar el cuidado y asistencia de estos niños a una entidad especializada en la protección de la infancia, el diputado Luis María Bandrés anunció que la compra del caserío responde al deseo de involucrar a los futuros inquilinos en las labores propias del medio rural: actividades agrícolas, jardinería... Se espera que este programa se ponga en funcionamiento a comienzos de abril y el objetivo es que, en un plazo sin determinar aún, los niños puedan integrarse en pisos compartidos. Por otro lado, la Diputación aprobó un convenio de colaboración con varios hospitales y residencias para la atención de personas mayores. El acuerdo engloba a 424 plazas y supone una inversión de 580 millones de pesetas.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Sobre la firma
Archivado En
- Centros menores
- Irún
- Diputación Foral Bizkaia
- Acogida niños
- Ayuntamientos
- Gipuzkoa
- Comunidades autónomas
- Familia
- Administración autonómica
- Administración local
- País Vasco
- Centros penitenciarios
- España
- Régimen penitenciario
- Administración pública
- Justicia
- Niños
- Servicios sociales
- Infancia
- Política social
- Menores
- Grupos sociales
- Sociedad