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El Prado clasifica en cuatro categorías a los patrocinadores de actividades

El escultor Eduardo Chillida diseña la medalla de honor del museo

El pleno del patronato del Museo del Prado debatió ayer una serie de normas de régimen interno sobre el patrocinio de actividades y aprobó el modelo de la medalla de honor del museo, que ha sido diseñada por el escultor Eduardo Chillida. El primer destinatario de esta medalla será el rey Juan Carlos.La regulación del patrocinio de las actividades del Prado afecta a personas naturales y jurídicas y quedan excluidos los acuerdos o convenios con administraciones públicas, autoridades y organismos públicos extranjeros y entidades eclesiásticas. Las aportaciones de cantidades en metálico o de servicios valorables económicamente se destinarán a actividades como adquisición de obras de arte, exposiciones temporales, cursos, congresos y visitas, ediciones y publicaciones, restauración de obras artísticas, copias y reproducciones, concursos y premios, y obras en edificios, dependencias e instalaciones del museo. La aceptación de herencias y legados en favor del museo y de donaciones de obras de arte tienen su regulación específica.

Los patrocinadores, según el borrador tratado ayer por el pleno, se clasifican en donantes del Museo del Prado, a los que hayan legado o donado obras de arte; benefactores, a los que hayan financiado actuaciones con aportaciones iguales o superiores a 400 millones de pesetas; protector, con aportaciones iguales o superiores a 75 millones e inferiores a 400 millones, y colaboradores, con aportaciones entre 20 y 75 millones desembolsados durante cinco años consecutivos o con cuatro millones en un solo ejercicio.

También se acordó que la Fundación Amigos del Museo del Prado tenga la condición de benefactor del Prado, por su vinculación a las tareas del museo desde su creación.

El pleno aprobó el diseño de la medalla de honor del Museo del Prado, que ha realizado el escultor Eduardo Chillida, por encargo en 1993 del presidente del patronato, José Antonio Fernández Ordóñez. La placa, de diez por seis centímetros, tiene unos motivos geométricos en relieve, con el nombre de Museo del Prado y la firma del artista.

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