Una exposición indaga en Zurbarán y su 'fábrica'

El Museo Municipal de Madrid (Fuencarral, 78) se unió ayer a los actos del cuarto centenario del nacimiento del pintor Francisco de Zurbarán (Fuente de Cantos, 1598-Madrid, 1664) con la apertura de la exposición Zurbarán y su obrador. Pinturas para el Nuevo Mundo. La muestra, organizada por el Consorcio de Museos de la Generalitat Valenciana, se ha presentado en el Museo de Bellas Artes de Valencia, y tras su paso por Madrid, hasta el 14 de marzo, visitará San Diego y Los Ángeles (Estados Unidos) y México.El historiador de arte Benito Navarrete, comisario de la exposición, se refirió ayer a "Zurbarán y compañía, S L" para destacar el objetivo de su investigación, tema de tesis doctoral, sobre los aspectos mercantiles de la fabricación de pinturas para el Nuevo Mundo, realizada por el pintor y su obrador en Sevilla. Zurbarán se lanza a la aventura americana, entre 1635 y 1655, con el envío desde el puerto de Sevilla de cientos de lienzos que se vendían en las ferias de Portobello y Veracruz, desde donde se extendían hacia México y Lima. Para atender a este mercado se realizaban las obras en serie, a partir de los modelos de grabados, donde intervenían el propio Zurbarán y los oficiales de su taller, cuyos nombres son conocidos por algunos pleitos, como Ignacio de Ries, Alonso de Flores o José Durán.

Como en una procesión

La capilla del antiguo hospicio es el escenario del montaje de la exposición, con 35 lienzos, 10 de ellos de la mano de Zurbarán y el resto en colaboración con el obrador o de sus discípulos. La especialista Odile Delenda lo identificó ayer con "los círculos de Zurbarán", al poder ver los contrastes de las pinturas desde la primera intervención del maestro y el posterior desarrollo más artesanal hasta llegar incluso a perderse el modelo.La serie religiosa de los fundadores de órdenes, a partir del ciclo del convento de las Capuchinas de Castellón, se presenta con un sentido procesional hacia el altar de la capilla. La faceta profana de la producción se ha colocado en el espacio del altar, con las series de los hombres de la fama, los ángeles, los infantes de Lara, santas vírgenes, sibilas y césares a caballo.

La disposición de los cuadros permite comparar los modelos originales del propio Zurbarán y las copias posteriores de los oficiles del obrador. Benito Navarrete dijo ayer que la exposición se aleja del tópico de un Zurbarán místico para descender al aspecto mercantil del arte y la mecánica de trabajo en el obrador. También sirve para presentar algunos aspectos inéditos en atribuciones de obras y en los orígenes de los modelos de las estampas.

Con motivo del centenario de Zurbarán se han celebrado en los últimos meses diversas exposiciones, en Barcelona, Valencia, Sevilla y Badajoz, donde se mantiene hasta el 30 de enero en el Museo de Bellas Artes.