Un bosque irrepetible
Un estudio descubre que los robles del hayedo de Montejo son únicos en el mundo por una variación de ADN
El hayedo de Montejo, auténtica joya ecológica de la región, ha guardado durante siglos un secreto que ahora han destapado los expertos de la Universidad Politécnica de Madrid. Los 12.000 robles que lo pueblan pertenecen a una especie única. "Su ADN es diferente al resto de sus congéneres europeos examinados", manifesta Luis Gil, profesor de la Escuela de Montes y jefe de este proyecto de investigación, iniciado en 1993 y en el que se han comparado los robles de 29 bosques del continente. "Mientras que todos los robles europeos conocidos, de Suecia a España, comparten un mismo ADN, los de Montejo, quizás porque quedaron aislados en alguna glaciación, poseen una genética diferente, sus cloroplastos [corpúsculos de la celula vegetal donde se almacena la clorofila] son distintos", señala Gil. No obstante, y a pesar de sus diferencias, el aspecto exterior del árbol es prácticamente igual al de sus congéneres.El hayedo de Montejo (250 hectáreas) es una frondosa masa forestal formada por unos 550.000 rebollos, 20.000 hayas y 12.000 robles. Se alza a unos 1.400 metros de altura, a orillas del río Jarama, y entre las provincias de Madrid y Guadalajara. Bajo su cúpula arbórea crecen especies tan diversas como acebos, majuelos, mostajos, sauces, avellanos y cerezos silvestres. Su cielo es cruzado por mirlos, zorzales, petirrojos, lechuzas, halcones y águilas reales y calzadas. Los mamíferos más comunes entre su espesura son los jabalíes, corzos, gatos monteses, zorros, liebres, comadrejas y nutrias. Durante siglos fue explotado como dehesa, pero hace algunas décadas el hombre dejó de intervenir en ella. El bosque fue cercado y, entonces, comenzaron los problemas.
Los científicos de la Politécnica han descubierto que el abandono humano ha provocado un desequilibrio en la regeneración tradicional. El número de hayas aumenta notablemente frente al de robles que, al tener una floración más tardía, abortan la mayor parte de sus semillas. La regeneración de la especie se hace entonces imposible. Por ello, los expertos han decidido tomar medidas que eviten su desaparición. Talarán hayas pequeñas o de repoblaciones recientes para que los robles puedan reproducirse más fácilmente. Además, plantarán nuevos robles en zonas actualmente despobladas.
Los expertos afirman que en el hayedo de Montejo sobrevive aún una docena de robles de más de 700 años (nacidos cuando los árabes comenzaban a levantar la Alhambra o Marco Polo iniciaba su viaje a China, por ejemplo). Algunos de ellos superan el metro y medio de grosor y alcanzan los 23 metros (la altura de un bloque de siete pisos). "Son verdaderamente impresionantes", afirma Gil.
La entrada al hayedo de Montejo está restringida desde hace años. Sólo se puede acceder a él mediante reserva previa en los teléfonos 91 869 70 58 y 91 869 72 17.
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