Álava aprueba un IRPF con mayores ventajas para comprar vivienda que en las otras provincias

VIENE DE LA PÁGINA 1 La principal novedad que incluyó el PP en la norma guipuzcoana, entre otras (ver EL PAÍS de ayer), es que las personas que emprendan nuevas actividades económicas queden eximidas de la obligación de realizar una declaración de su patrimonio durante los dos primeros ejercicios de su actividad. El impuesto de Vizcaya y Guipúzcoa diferirá respecto al de Álava en varios aspectos pactados bien con el PP o bien con el PSE-EE. Primero, el tratamiento a los separados que vayan a seguir pagando la vivienda de su anterior cónyuge, que podrán deducir esta cantidad y compatibilizarla con la deducción de la compra o alquiler de otra vivienda. Segundo, se reconocen las aportaciones por manutención de los hijos en caso de separación y se aumentan las deducciones. Tercero, se establecen varios tramos a la hora de desgravar por vivienda habitual. Cuarto, los gastos de defensa jurídica en caso de litigio entre trabajadores y empresas deducirán hasta 50.000 pesetas anuales. Por último, se establece un deducción complementaria de 25.000 pesetas por cada hijo menor de tres años. Con este impuesto por delante y pendientes de los plenos de Vizcaya, el próximo 21 de este mes, y Guipúzcoa, el 23, las decisiones de voto están ya bastante cerradas. El PSE-EE votará a favor del global del impuesto y perderá en Vizcaya la enmienda que coló en la Comisión de Hacienda,con el apoyo de HB, sobre la tributación de las plusvalías de capital al tipo medio del contribuyente y no al 20% como establece el proyecto. Los socialistas argumentan su decisión en que el impuesto es esencialmente progresista y el PNV lo ha pactado con ellos. Un "bodrio" El PP, que define al impuesto en su conjunto como un "bodrio", se abstendrá en todo salvo en la enmienda socialista, que votará en contra y en las enmiendas que ha pactado con el PNV, en las que votará favorablemente. De esta manera el PNV logra el impuesto armonizado plenamente en Guipúzcoa y Vizcaya y distinto en Álava. En este territorio se practicará un borrón y cuenta nueva en vivienda,de acuerdo con el impuesto que ya se aprobó ayer en el pleno de sus Juntas Generales. Todo contribuyente podrá desgravar un total de 4,5 millones de pesetas por invertir en el piso donde resida, independientemente de la fecha en que lo haya comprado. En caso de venta del piso, un 15% de las plusvalías obtenidas también se restarán de esa cantidad. Vizcaya y Guipúzcoa se regirán por una norma diferente porque el proyecto inicial del PNV no se ha alterado. En Álava se modificó a propuesta del grupo neoforalista, y con el total consentimiento de los nacionalistas. En las otras provincias también se establece el concepto de crédito fiscal, esto es, los 4,5 millones que cada persona se podrán deducir por la adquisición de su vivienda habitual. Sin embargo, se traza una raya entre quienes la compraran antes o después del 1 de enero de 1999, fecha en que entrará en vigor la reforma fiscal. De ese modo, el dinero que los contribuyentes ya hayan desgravado antes de ese día se descontará de los 4,5 millones de pesetas. En otras palabras, tendrán un cupo menor para deducir por vivienda. La modificación introducida en Álava corrige, según el diputado de Hacienda, el nacionalista Juan Carlos Peral, ciertas discriminaciones e incluso irregularidades que podía generar el texto original. Un argumento rebatido por la oposición, aunque todos coincidieron en admitir que esa medida "puede ayudar a quienes cambien de vivienda". El otro detalle, de menor importancia, que tendrá en Álava un desarrollo diferente al de Vizcaya y Guipúzcoa se refiere al Impuesto de Sociedades. Los socialistas consiguieron a última hora sacar adelante una enmienda que permitirá revisar los incentivos fiscales derivados de la nueva norma, con el fin de adaptarlos a las directrices comunitarias. Para ello se realizará un estudio en el plazo máximo de cuatro meses. Así las cosas y con elecciones municipales y a Juntas Generales en el mes de junio de 1999 los partidos políticos auguran un futuro incierto a la norma del IRPF. Los popularesm contrarios a la filosofía del impuesto en su conjunto y partidarios de establecer el mínimo vital, tal y como recoge la norma estatal, estarían dispuestos a plantear su reforma. De hecho donde más posibilidades tienen de modificarla es en Álava si repiten resultados con respecto a las últimas elecciones autonómicas del 25 de octubre. Al mismo tiempo, HB apostará en Guipúzcoa para modificar el impuesto si mantiene su tendencia al alza. De esta forma la armonización de Ibarretxe se podría mantener tan sólo en Vizcaya. Ayer mismo el portavoz del PSE-EE en las Juntas Generales de Vizcaya, Melchor Gil, auguraba a la norma un vida efímera.