_
_
_
_

La Fundación Saura anuncia que demandará a las herederas del pintor

La Fundación Antonio Saura emprenderá acciones legales contra las herederas del pintor aragonés (su hija, Marina Saura, y su viuda, Mercedes Beldarrain), fallecido el 22 de julio pasado en Madrid, si éstas no devuelven antes del jueves la obra del pintor que el patronato considera propiedad de la fundación. La decisión se tomó ayer en Cuenca, a falta de dos días para que se cumplan los 30 establecidos en un requerimiento notarial que instaba a las herederas a entregar a la fundación la colección de pintura Crónica del 94, 365 dibujos y 365 documentos de prensa que la fundación considera donados por el pintor en el momento de la creación del organismo. El patronato también reclama el proyecto de fundación (diseño de los espacios, el mobiliario, los catálogos y el plan de exposiciones) realizado en vida por Saura.Las herederas del artista aragonés, que no pudieron ser lozalizadas ayer por este periódico, decidieron abandonar la fundación poco después de conocer el testamento de Saura. Adujeron para ello que la fundación no garantizaba las condiciones de perennidad que el pintor siempre había pedido en vida, y que su voluntad expresa era no llevar adelante el proyecto en esas condiciones. Tras ellas, y en desacuerdo por el creciente clima de enfrentamiento, dimitieron también los patronos José Manuel Bonet, Valeriano Bozal y Tomás Lloréns.

Intereses

La fundación acordó también ayer contratar los servicios de un despacho de abogados -el del letrado Rafael A. Mombiedro- para que "defienda los intereses de la fundación y de la ciudad a la que Antonio Saura quiso donar una parte de su patrimonio, y para que se cumpla así lo que está escrito", según informó su portavoz, Santiago Catalá. Aunque el Ayuntamiento de Cuenca, la Diputación y la Junta de Comunidades han comprometido ya en la fundación inversiones por valor de más de 160 millones de pesetas, el patronato acordó ayer estudiar la compra para la Casa-Museo Zavala (sede del organismo) de una colección de dibujos del pintor, en concreto la serie de 27 originales que ilustra el libro La muerte y la nada, que fue editado en 1990 en Suiza por Pierre Canova y que puede costar 35 millones.Tras lamentar que los representantes legales de las herederas (el despacho de abogados Garrigues & Andersen) declinaran acudir a la reunión de ayer, Catalá aclaró que el patronato no aceptó las condiciones que pusieron los abogados de la familia para sentarse a dialogar (entre otras, levantar el requerimiento notarial, vetar a Santiago Catalá como interlocutor y reunirse en Madrid en la hora y fecha establecida por ellos).

La reunión contó ayer con la asistencia del alcalde de la ciudad, la presidenta de la Diputación, un representante de la Junta de Comunidades, y los patronos privados Pedro Mombiedro, Antonio Pérez y Santiago y Emilio Catalá, presidente en funciones y ex vicepresidente.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_