Frei pide unidad nacional en favor de la libertad de Pinochet

El presidente de Chile, el democristiano Eduardo Frei, reiteró ayer que su Gobierno trabaja para buscar una reconciliación entre los chilenos, basada en la justicia, el arrepentimiento y el perdón, al redoblar sus esfuerzos por unificar criterios en favor de la libertad del general retirado Augusto Pinochet. Tras una serie de incidentes suscitados por las distintas visiones que el caso Pinochet genera entre sus aliados políticos, Frei asegura que el Gobierno chileno continuará sus esfuerzos para lograr el regreso del senador vitalicio a Chile.Mientras el Ejecutivo de Frei ha sostenido con argumentos jurídicos que el general retirado Pinochet, detenido en Londres desde el pasado 16 de octubre y en la actualidad en libertad vigilada, debe ser liberado, el ala izquierda de la alianza gubernamental no oculta su satisfacción por los problemas judiciales del exdictador.

La detención de Pinochet ha puesto de relieve las diferencias entre los socios de la alianza que gobierna Chile desde 1990, en la que los socialistas se debaten en la contradicción que supone su condición de antiguas víctimas de la dictadura y sus actuales deberes de Estado.

Excusas insuficientes

El viaje de dirigentes socialistas a Londres para apoyar el procesamiento de Pinochet, y una carta que un grupo de diputados de ese partido envió al ministro británico del Interior, Jack Straw, originaron duras críticas en su contra, procedentes principalmente de la Democracia Cristiana (DC). El principal partido de la alianza suspendió sus actividades en la coalición y consideró insuficientes las excusas presentadas por los diputados que enviaron la carta a Straw, en la que le hacían ver que en Chile no hay condiciones para juzgar a los responsables de las violaciones a los derechos humanos.La carta se difundió mientras el canciller José Miguel Insulza hacía gestiones en Londres y Madrid en favor del regreso de Pinochet. Entre otros argumentos, Insulza defendió la capacidad de la justicia chilena para procesar al exdictador.

En este clima, Frei procura borrar las fisuras internas entre sus aliados, que debilitan las medidas que ha tomado frente al caso. El Gobierno "trabaja en la búsqueda de una reconciliación nacional basada en la verdad, la justicia, el arrepentimiento y el perdón", afirmó Frei tras recibir el apoyo de los 38 diputados democristianos de la Cámara baja del Parlamento.

Frei, que también recibió el apoyo de otros sectores de la alianza, considera que cuenta con "un respaldo al país, a su institucionalidad y a la búsqueda de un camino común para todos los chilenos".