La Unesco eleva la ciudad de Cervantes a Patrimonio de la Humanidad

La Comunidad invertirá miles de millones en mantener el casco histórico. El rector de la Universidad recuerda que Alcalá lleva 20 años trabajando por su recuperación. Ruiz-Gallardón: "El premio nos sitúa en la vanguardia de la cultura"

La cuna de Cervantes entró ayer en el selecto grupo de las ciudades declaradas Patrimonio de la Humanidad, un título que sólo tienen 70 localidades en todo el planeta, y que la equipara con Salamanca o con la antigua capital imperial de Japón, Kioto. Fue en esta ciudad nipona donde se reunieron los 21 miembros del Comité del Patrimonio Mundial de la Unesco, la organización de la ONU encargada de la educación y la cultura, para dar el apoyo definitivo a la solicitud presentada en junio de 1997 por el Ayuntamiento complutense y la Universidad de Alcalá. Sólo se opuso el embajador de Tailandia.

El jurado consideró que Alcalá es la primera ciudad universitaria planificada del mundo. "Fundada por el cardenal Cisneros a principios del siglo XVI, fue modelo de la ciudad de Dios (Civitas Dei), comunidad urbana ideal que los misioneros españoles exportaron a América y modelo de otras universidades de Europa", dice el comunicado difundido por la Unesco.

"Son las 19.20 aquí en Japón, acaban de declarar a Alcalá Patrimonio de la Humanidad". Con estas palabras anunció el alcalde complutense, Bartolomé González, del PP, que la Unesco había aceptado la solicitud de esta localidad de 163.000 habitantes. Eran las 11.20, hora peninsular. La corporación complutense y los periodistas, reunidos en torno a un teléfono sin manos, prorrumpieron en aplausos. A éstos les sucedieron el descorche de más de un centenar de botellas de cava y los brindis y abrazos en los pasillos con los representantes de las entidades ciudadanas. Era el colofón a dos años y medio de esfuerzos e inversiones por parte de las instituciones promotoras, la universidad, el Ayuntamiento y la Comunidad. PASA A LA PÁGINA 3

Cuarenta candidatos