Elorza quiere que San Sebastián recuerde con esculturas a las víctimas de la violencia

El alcalde de San Sebastián, el socialista Odón Elorza, va a promover la realización de un gran proyecto artístico y escultórico que tenga como eje la evocación de la paz y la memoria de las víctimas de la violencia y en el que participarán escultores vascos y europeos. La propuesta forma parte de un plan estratégico que persigue aprovechar el cambio de siglo y el nuevo milenio para situar a San Sebastián en el "mercado internacional de ciudades", y será debatida la próxima semana por el gobierno municipal.

Elorza lleva varios meses fraguando una batería de propuestas que ya ha presentado a sus socios de gobierno (PNV y EA) y que pretende "dotar a la ciudad de una estrategia propia con la que actuar en la Europa de las ciudades que asoma en el siglo XXI". El alcalde reclama un "esfuerzo intelectual" para "repensar" la ciudad y en esa ambición incluye el interés por convertirla en un hito que incluya tanto "el recuerdo a todas las víctimas de la violencia en los últimos 25 años" como una reflexión sobre la paz y la reconciliación social. El regidor donostiarra explicó ayer que, coincidiendo con la declaración de tregua por ETA y el 50º aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, "esta ciudad que tanto ha padecido en estos años se plantea el reto de rehacer nuestro sistema de convivencia, de fortalecer la dimensión humana en nuestras relaciones y de trabajar a favor de la paz". Desde esta exposición de motivos, la propuesta se plasmaría en las intervenciones imaginativas en el plano artístico que adquieran relevancia no sólo en la comunidad autónoma, sino también en el escenario internacional, "de forma que sirvan para fortalecer la vía que se ha abierto hacia la definitiva pacificación y normalización política". Apoyo del Macba y el IVAM El proyecto que bulle en la mente de Elorza consiste en encargar a especialistas un proyecto escultórico y artístico que suponga una intervención pública en un gran espacio de la ciudad que tenga como eje central la evocación de la paz y que ayude a crear "una dinámica social de tal envergadura que haga irreversible el proceso iniciado y se convierta en un elemento más de la superación del conflicto de la violencia". En este empeño ha contado en los últimos meses con el asesoramiento de Manuel Borja, director del Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona (Macba); Vicente Todoli, ex director del Instituto Valenciano de Arte Moderno (IVAM), y Santi Eraso, director de Arteleku. Una de las cuestiones que el Ayuntamiento debe despejar es dónde se materializa el proyecto, tal vez en un parque público, y a qué artistas se encargaría las obras. Elorza ha esbozado que las actuaciones artísticas integradas en un recorrido que diera coherencia al proyecto tendrían hitos simbólicos y poéticos referidos a conceptos como tolerancia, violencia, diálogo, paz y reconciliación. De esta forma la creación artística contribuiría a "homenajear a todas las víctimas de la violencia y a fortalecer el apoyo moral a sus familias". El planteamiento de Elorza ha suscitado una reacción de cierto recelo entre sus socios de gobierno, que perciben "en estos momentos" un interés partidista que el primer edil niega de forma tajante. El documento que ha entregado a los socios nacionalistas incluyen también reflexiones para combatir los efectos de una ciudad "demasiado ensimismada con su pasado".