Barcelona da refugio al escritor cubano Rolando Sánchez Mejías

En los últimos tiempos, la carrera del escritor cubano Rolando Sánchez Mejías se encontraba seriamente amenazada. Sus discrepancias con el régimen castrista le estaban conduciendo a una suerte de muerte civil en su país: nadie le daba trabajo ni tenía posibilidad de publicar sus obras. Ahora, Sánchez Mejías ha cambiado un futuro incierto en Cuba por un presente esperanzador en Barcelona. Él es el segundo escritor que se instala en la capital catalana en el marco de la red europea de ciudades refugio.

Este programa de acogida está impulsado por el Parlamento Internacional de Escritores, que depende del Consejo de Europa. Se puso en marcha en 1995 para asistir a los escritores que, por estar físicamente amenazados o por sufrir una exclusión disfrazada con procedimientos sutiles, no pueden desarrollar libremente su actividad intelectual en sus países de origen. En esta última situación se encontraba Rolando Sánchez Mejías, que había provocado las iras de las autoridades cubanas con diversos escritos -entre ellos dos cartas publicadas por EL PAÍS- en los que denunciaba la situación de los intelectuales de la isla. En la actualidad, la red de ciudades refugio está integrada por una veintena de municipios europeos. A través de su Ayuntamiento, cada ciudad se compromete a garantizar, por un periodo de un año prorrogable a dos si el escritor tiene familia, el alojamiento y la manutención del autor tutelado. Paralelamente se le organizan toda una serie de intervenciones en foros universitarios, como conferencias, cursos y debates, y se le proporcionan contactos con los círculos literarios y editoriales. El objetivo es conseguir que el escritor tutelado sea capaz de integrarse en el tejido cultural del municipio receptor para garantizar su independencia cuando el plazo de acogida expire. Barcelona entró a formar parte de la red de ciudades refugio en 1996. Se estrenó con el escritor albanés Baskim Shehu, una prueba palpable de que el programa puede funcionar: ha conseguido publicar un libro y planea quedarse a vivir en la ciudad de forma permanente. Éste es también el objetivo de Rolando Sánchez Mejías, que ha publicado varios libros, principalmente de cuentos y poemas -entre ellos una antología de jóvenes poetas cubanos-. El escritor pretende concluir en Barcelona los dos proyectos literarios que actualmente tiene en marcha: la escritura de su primera novela y un ensayo sobre la problemática actual de los intelectuales cubanos.