Los rectores reclaman que todos los partidos se comprometan con la universidad del futuro

El futuro de la universidad española no está ni debe estar sólo en manos de sus protagonistas, los universitarios, sino que debe ser objeto del interés prioritario de los políticos y de toda la sociedad. Está en juego el futuro del país si no se afronta con decisión y sin partidismos. Éste es el mensaje de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE), cuyo presidente, Saturnino de la Plaza, hizo ayer un llamamiento solemne: "Si queremos una universidad de calidad y competitiva, es imprescindible un compromiso de todos los partidos, de todas las instituciones del Estado y de la sociedad en su conjunto. En educación superior necesitamos una política de Estado, sin sectarismos, con proyección en el tiempo".Uno de los problemas estructurales de la universidad española es la insuficiencia de recursos económicos. De la Plaza afirmó que "el Parlamento debe revisar el sistema de financiación y establecer un marco estatal que, desde los Presupuestos Generales del Estado y a través de las comunidades autónomas, garantice unas condiciones mínimas a todas las universidades".

La ministra de Educación, Esperanza Aguirre, ha respondido reiteradamente a esta demanda que las universidades deben negociar sus condiciones de financiación con las comunidades, que son las que tienen competencias, y en ningún momento ha mostrado entusiasmo por un pacto de Estado de esta naturaleza.

El acuerdo nacional reclamado por los rectores permitiría pasar, en un plazo de cuatro o cinco años, del actual 1% del producto interior bruto (PIB) de gasto público universitario al 1,5% de media en los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). En números absolutos, supondría pasar de algo más de 600.000 millones de pesetas anuales a un billón de pesetas. En gasto por alumno, la Conferencia de Rectores baraja las siguientes cifras: por cada 100 pesetas de España, Italia gasta 155; Francia 160; Holanda 260; Suecia 380, y Estados Unidos, 420.

Familias numerosas

Entre los problemas pendientes de una solución urgente están el de la compensación por la exención de tasas con las nuevas familias numerosas, que ha originado una merma de ingresos de 32.000 millones de pesetas. "Las Cortes, que aprobaron el cambio de la familia numerosa, deberían tomar el acuerdo de compensar por ello a las universidades", dijo el presidente de la CRUE.De la Plaza destacó que las misiones de la universidad se ampliarán de forma sustancial en el futuro, con la reforma de la formación de posgrado, los cursos de reciclaje profesional, la creciente atención a alumnos mayores de 25 años, muchos de ellos en su segunda carrera, la escolarización a tiempo parcial e incluso la docencia a población no universitaria. A ello habrá que sumar la participación de las universidades en la innovación tecnológica de las empresas, con la necesaria aproximación de su oferta de investigación a la demanda del sector productivo.

La CRUE se propone que el informe sobre la universidad del futuro cuya dirección ha encargado a Josep Maria Bricall, ex presidente de los rectores europeos, no sea tomado como un análisis endogámico, sino que reciba el patrocinio institucional del Parlamento, a cuya consideración será sometido, y que en él participen, además de los miembros de la comunidad universitaria, los partidos, los sindicatos, los empresarios y representantes de diversos sectores.

La reforma del profesorado (que supondría la modificación de la Ley de Reforma Universitaria) es otro de los problemas urgentes, a juicio de De la Plaza, que ayer reiteró la necesidad de que la estabilización profesional de parte del profesorado no funcionario (unos 22.000 asociados, de ellos más de 8.000 a tiempo completo) venga acompañada de las correspondientes dotaciones financieras, algo de lo que aún no hay garantías por parte del Gobierno.