Receta de Hopkins para actores: locura y valentía

Mucha valentía y algunas dosis de locura. Esta receta brinda el actor británico Anthony Hopkins a todos aquellos que quieran dedicarse a la interpretación. Ahora bien, uno de los actores que mejor ha transmitido el terror o el tormento desde una pantalla, en películas como El silencio de los corderos o Drácula, declaró ayer su afición por el cine de aventuras al presentar en San Sebastián su último trabajo: La máscara del Zorro. Desde una mirada intensamente azul y casi transparente y un aire entre distraído y ausente, este maestro de la interpretación señaló ante cientos de periodistas que "para ser actor hay que estar un poco loco". Antonio Banderas entregó anoche a Hopkins el Premio Donostia europeo de esta edición del Festival de San Sebastián.

Cuentan sus biografías que Anthony Hopkins (Gales del Sur, 1937) pasaba, de joven, largas horas viendo películas de terror protagonizadas por tipos tan irrepetibles como Boris Karloff, Bela Lugosi y Lon Chaney. Debió aprender mucho de aquellas interpretaciones porque este actor, formado en el teatro como tantos otros británicos, se ha convertido en una las encarnaciones contemporáneas más sobresalientes de la crueldad. Fue el despótico capitán Bligh en la última versión cinematográfica del famoso motín de la Bounty, dio vida a Hitler en El búnker, y sobre todo impresionó con su personaje del psiquiatra Anibal Lecter en El silencio de los corderos. Por este excepcional trabajo recibió el Oscar al mejor actor en 1992. Pero los registros de este galés han abarcado también, entre otros cometidos, los dramas intimistas de época dirigidos por James Ivory como Lo que queda del día. Todo ello sin contar su larguísima experiencia con los clásicos en los escenarios teatrales hasta su llegada al cine, con más de 30 años.Pero a Hopkins también le gusta el cine de aventuras y, a pesar del riesgo que podía significar su presencia en La máscara del Zorro, aceptó el envite, aunque su mujer le advirtió que ya no tenía 21 años. "Era una oportunidad", comentó ayer en una multitudinaria conferencia de prensa, "de recrear el cine de aventuras, el guión era muy bueno y disfruté trabajando con Antonio Banderas y Catherine Zeta-Jones a las órdenes de Martin Campbell". Cuando le preguntaron a Banderas, Zorro discípulo en la ficción y en la realidad, qué opinión tenía del Zorro maestro, el actor malagueño manifestó: "Es generoso, imaginativo y abierto. Ha sido un sueño trabajar con él".

Banderas leyó anoche, en el teatro Victoria Eugenia donostiarra, una carta a Hopkins cuando le entregó el Premio Donostia europeo ante más de 1.000 asistentes a la gala. A la altura de sus 60 años, con una trayectoria que le ha llevado a una consagración definitiva y retirado del alcohol, que estuvo a punto de costarle la vida, Anthony Hopkins declaró en público que no hace planes sobre sus proyectos futuros. "Elijo aquello que llega a mi mesa y que me resulta atractivo. Me fijo en el guión, en el director, en los actores... La historia del Zorro me pareció una proposición sugerente y además rodamos en México, que es un país que me gusta mucho".

Los proyectos de los dos Antonios estuvieron muy presentes en las preguntas de los periodistas, que interrogaron durante más de una hora a las estrellas, acompañadas de Catherine Zeta-Jones y Martin Campbell, que no pasaron del papel de comparsas. En esa línea de planes, Hopkins no descartó una nueva versión de El silencio de los corderos, si bien matizó que hasta la fecha no le habían enviado ningún guión, pese a los comentarios sobre una continuidad de aquella escalofriante historia.

Banderas será Víctor Jara

En cambio, Antonio Banderas ya ha aceptado la oferta de la cineasta británica Emma Thompson para interpretar el personaje del cantante chileno Víctor Jara, asesinado por la dictadura del general Augusto Pinochet a los pocos días del golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973. Este papel viene a sumarse a una ya larga lista de personajes latinoamericanos que ha representado Banderas. "Thompson dirigirá este proyecto e interpretará el papel de Joan Jara. Pero antes quiero terminar mi película Crazy in Alabama", indicó Banderas, que sonrió cuando le preguntaron si había sido una coartada para dar órdenes a su mujer, Melanie Griffith, que tiene el rol de protagonista. "Ella conocía mejor su papel que yo y no ha hecho falta apenas dirigirla. Admiraba a Melanie como actriz antes de enamorarme de ella".El actor andaluz, que ya acompañará para siempre a Douglas Fairbanks y Tyrone Power, entre otros, como rostro del Zorro, resaltó que echaba de menos su tierra, y agregó: "No me quito de la cabeza que trabajo para el público español. No logro acostumbrarme a trabajar para los espectadores de Oklahoma".