El atentado de Lockerbie podrá ser juzgado en Holanda

En un intento de terminar con una paralización de 10 años, Estados Unidos y el Reino Unido anunciaron ayer su disposición a permitir que los dos libios sospechosos de haber volado un jumbo estadounidense sobre Escocia en 1988 sean juzgados en Holanda por jueces escoceses. Si Libia se niega a aceptar este juicio, Washington ha amenazado con promover un embargo internacional al petróleo libio.La decisión de los Gobiernos de Washington y Londres fue criticada con dureza por miembros de las familias de las víctimas estadounidenses, que calificaron la decisión de "profanación" por ceder a lo que denominaron "chantaje" por parte del líder libio, Muammar el Gaddafi. Las familias de tres víctimas británicas mostraron sin embargo su satisfación ante la perspectiva de que se cierre el caso.

La decisión fue anunciada conjuntamente en Londres y Washington por la secretaria de Estado, Madeleine Albright, y el secretario del Foreign Office, Robin Cook. Albright declaró que "la medida está de acuerdo con las resoluciones del Consejo de Seguridad [sobre Libia]". Después de consultar con el Gobierno holandés, añadió Albright, "hemos decidido seguir adelante con el juicio de los dos sospechosos por un tribunal escocés, con jueces escoceses y bajo la ley escocesa".

Washington y Londres quieren poner a prueba la buena fe de Gaddafi que, hasta ahora, se ha negado a que los dos agentes de los servicios secretos libios acusados del atentado y refugiados en Libia sean juzgados en EEUU o Gran Bretaña, pero que ha dejado la puerta abierta a que el juicio se celebrara en un tercer país. El atentado contra el vuelo 103 de la Pan Am cuando se encontraba sobre la localidad escocesa de Lockerbie causó la muerte de 270 personas, entre ellas, 189 ciudadanos estadounidenses.