Azkuna recuerda a Merino que a pesar de sus críticas hubo fraude en Osakidetza

El consejero de Sanidad, Iñaki Azkuna, rehuyó ayer la polémica con el dirigente del PSE José Luis Marcos Merino, a pesar de que el día anterior éste había acusado a Osakidetza de montar un "proceso paralelo" al procedimiento judicial por el fraude de las oposiciones de 1990 para poder incriminarle. Aunque se mostró lacónico, Azkuna recordó a Merino que "hubo un fraude, una resolución del Parlamento vasco y una sentencia de la Audiencia Provincial de Vitoria. Cuando hablan los jueces lo que hay que hacer es acatar".

Marcos Merino fue absuelto la semana pasada por la Audiencia Provincial de Vitoria de un presunto delito de falsedad en documento oficial por el cambiazo de exámenes de la Oferta Pública de Empleo (OPE) de hace ocho años. Sin embargo, la sentencia constata que el dirigente del PSE no ha podido justificar su coartada, pero le absuelve por falta de pruebas. Merino compareció el martes ante los medios de comunicación para arremeter contra el juez instructor del caso, contra la prensa y contra el Departamento de Sanidad. A los responsables de esta consejería, dirigida por el PNV, les acusó de "faltar a la verdad por escrito y en sus declaraciones antes y después del juicio". Azkuna no quiso ayer polemizar con Merino y recalcó: "Lo único que me preocupa de Osakidetza es su presente y su futuro. El fraude de la OPE del 90 es pasado". Sin embargo, sí enfatizó que "hubo un fraude y hay una sentencia que lo condena". Normalidad Por otra parte, el director general de Osakidetza, Luis Hernández, consideró ayer ante la comisión de Sanidad del Parlamento vasco que la última Oferta Pública de Empleo ha "salido razonablemente bien". Los exámenes teóricos y prácticos de esta oferta de empleo se celebraron durante el mes de abril. A lo largo de junio se realizará el concurso de méritos y las pruebas de idiomas. En total, 42.151 personas han competido por 718 plazas. Hernández reconoció que se produjo un error en el examen correspondiente a la categoría de pediatría de equipo de atención primaria. "Un funcionario entregó al tribunal de esa prueba el examen correspondiente a pediatría hospitalaria", señaló. El tribunal no suspendió la prueba y se limitó a eliminar varias preguntas. Varios opositores han recurrido a la vía judicial. Además, también se refirió a las quejas de varios participantes en la prueba de médicos de urgencias hospitalarias, que expresaron sus sospechas de que el examen había sido filtrado a las personas que defendían la plaza. "Osakidetza se mueve por pruebas, no por sospechas", dijo.