_
_
_
_
Reportaje:

Médicos cubanos y españoles colaboran en avances quirúrgicos contra el Parkinson

Hasta la década de los cincuenta, la ciencia no logró desarrollar ningún tipo de remedio para paliar los graves efectos psicomotrices que produce la enfermedad de Parkinson. Los enfermos convivían hasta entonces con terribles temblores, enlentecimiento de los movimientos, una severa rigidez de su cuerpo y otras alteraciones psicomotrices, lo que convertía la vida de los pacientes y de sus familiares más cercanos en un verdadero calvario.Diez años más tarde, los primeros pasos de la cirugía en el centro del cerebro y el hallazgo de la L-dopa, fármaco de la misma familia que la dopamina -el Parkinson aparece cuando mueren las neuronas que producen dopamina, las que controlan los movimientos del cuerpo-, empiezan a arrojar luz sobre una enfermedad que hoy, en los albores del siglo XXI, científicos y médicos parecen tener controlada con ciertos matices. Lo que sí se puede afirmar es que en la actualidad los especialistas en esta grave dolencia tratan de ofrecer al paciente una mayor calidad de vida, una convivencia con la enfermedad menos traumática. El Centro Internacional de Restauración Neurológica (Ciren) de Cuba realiza desde hace dos años un tipo de intervención quirúrgica en la zona del cerebro denominada subtálamo basada en la cirugía estereotáxica. Con ella, ciertos enfermos de Parkinson han experimentado una sensible mejoría tanto en la rigidez como en los temblores, el habla, la deglución y la marcha, fenómenos tipo de esta dolencia. Además, la mejora es inmediata.

Esta intervención quirúrgica denominada subtalamotomía hasta ahora sólo se ha aplicado en Cuba a 12 pacientes, con una mejoría global del 56%, tras un periodo de experimentación en monos y ratas. Gracias a sus esperanzadores resultados cuenta con el beneplácito de la Academia de Neurología de Estados Unidos, y en breve la prestigiosa revista Lancet publicará los pormenores del avance quirúrgico del Ciren.

La subtalamotomía es una cirugía de precisión, realizada con un parte estereotáxico, que consiste en lesionar ciertas neuronas de un punto concreto del subtálamo tras precisar la zona a intervenir mediante un software, escáner y resonancia.

Marco estereotáxico

Julián Álvarez, presidente del Ciren, considera la técnica de la subtalamotomía como una verdadera revolución en los avances experimentados en los últimos años para paliar esta enfermedad degenerativa e incurable.El Ciren aplica un marco estereotáxico propio, de aleaciones de aluminio y punta de titanio, menos pesado y costoso que el creado con anterioridad por suecos y norteamericanos, que es el empleado habitualmente en operaciones del cerebro. El fracaso de la medicación con el fármaco L-dopa en ciertos enfermos con Parkinson y un mayor conocimiento sobre el tálamo y el pálido (zonas del cerebro que también tienen puntos quirúrgicos para reducir los temblores y la rigidez) ha permitido realizar desde 1992 intervenciones similares a la subtalamotomía. Pero sólo el Ciren ha apostado decididamente por la lesión en el subtálamo para reducir las disfunciones en ciertos casos.

Médicos de Grenoble (Francia), de Atlanta (EE UU) y de Toronto (Canadá) realizan desde hace apenas cuatro años otro tipo de intervención: la estimulación subtalámica, menos arriesgada que la lesión en esta zona de cerebro, pero más costosa. En España, esta misma operación se lleva a cabo en el hospital Clínico de Barcelona, en el Ramón y Cajal de Madrid y en el hospital Central de Asturias. El equipo multidisciplinar de movimientos anormales del hospital Central de Asturias, dirigido por el neurocirujano Fernando Seijo, ha aplicado desde el pasado mes de enero el software cubano para el registro eléctrico del cerebro en tres operaciones de estimulación subtalámica en enfermos avanzados de Parkinson. En estas operaciones se ha instalado un electrodo en el subtálamo de los pacientes que bloquea las neuronas dañadas por la dolencia. Dos de los pacientes operados experimentaron desde el mismo momento de la intervención una sensible mejoría en las disfunciones físicas típicas de la enfermedad.

En la última intervención quirúrgica de estimulación subtalámica efectuada el pasado día 14 en el hospital Central de Asturias participó Raúl Macías, neurofisiólogo y vicedirector científico del Ciren. Asturianos y cubanos han intercambiado experiencias en la isla caribeña. Ambos equipos médicos utilizan prácticamente la misma metodología desde hace dos años, aunque los segundos no realizan estimulación subtalámica y son firmes partidarios del paso irreversible que supone la subtalamotomía.

El bloqueo norteamericano impide que el Ciren consiga con facilidad los electrodos necesarios para la estimulación subtalámica. Quizá por eso los cubanos se hayan arriesgado a la vuelta de tuerca que supone la subtalamotomía. Según los médicos del Ciren, esta última operación tiene muchas ventajas. Entre ellas, que «es permanente y menos cara que las anteriores, y sus resultados son igualmente buenos», opinan.

Seijo considera que la técnica de la subtalamotomía es un paso importante y muy positivo para el control de la enfermedad y no descarta que en un futuro próximo la medicina pública española utilice la técnica cubana, pero hoy por hoy estima que sus efectos secundarios son desconocidos y su imposible vuelta atrás despierta ciertas incógnitas. Tanto la subtalamotomía como la estimulación subtalámica son intervenciones pioneras en el mundo. Sólo existen 15 casos publicados de la última.

Tanto en una intervención como en otra, de entre ocho y nueve horas de duración, el paciente permanece despierto, tan sólo con anestesia local en los puntos de la cabeza donde se coloca el marco estereotáxico, y atendiendo a las preguntas del cirujano sobre los movimientos que puede ejecutar en ese mismo momento.

Riesgos

Los riesgos en las dos operaciones son parecidos. Lesionar las neuronas situadas sólo un milímetro más lejos del determinado por el escáner puede afectar al movimiento psicomotriz del cuerpo, pero la extrema precisión con la que se efectúa la operación reduce al mínimo esta posibilidad.Este tipo de operaciones requieren una preparación intensa del paciente que va a ser intervenido, quien en todo momento debe estar bien informado sobre los riesgos que entraña.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_