"Sólo queremos ayudar"

Manuel Puig, un hombre de larga trayectoria en el trabajo con jóvenes criados en ambientes de pobreza y marginación, aseguró ayer que la única finalidad de la SAT de su propiedad es la de "favorecer la formación laboral de jóvenes adolescentes que, una vez alcanzada la mayoría de edad y finalizado su periplo en los centros de menores, tienen muy complicado su acceso al mercado de trabajo". El director del Centro de Recepción de Menores de Godella, una entidad dependiente de la Generalitat, defiende que la percepción de las subvenciones "ha sido siempre totalmente transparente. El único objetivo que nos impulsó a crear la granja fue el de contribuir a la resocialización de los adolescentes con problemas, en ningún caso obtener beneficios. Nunca hemos tenido ánimo de lucro, y si hemos incurrido en alguna irregularidad, ha sido involuntariamente: todo el mundo en la consejería sabía a quién se concedían las ayudas". Pérez Campos insiste en el mismo discurso: "[Los tres socios de la empresa] nunca hemos ocultado nada, la petición de subvenciones -que este año no ha sido realizada- ha ido precedida de la presentación de los documentación pertinente, ya que la SAT es una entidad concebida sin afán de obtener beneficios. Nuestro único objetivo ha sido y es el de crear un centro de inserción laboral pensado para ayudar a muchachos de entre l6 y 18 años". Idéntica versión es la de Fernando Mascarell, el encargado de supervisar los trabajos en las instalaciones de Chiva: "Sólo queremos ayudar a chicos con problemas".