El Reina Sofía expone 350 objetos industriales de 200 diseñadores

El Museo Nacional Reina Sofía tiene ante su fachada un avión y un ala de Airbus de CASA, un vagón Talgo, un autocar Irízar, un camión Pegaso, un velero y un submarino de recreo de La Moa-Ronaútica. Los vehículos forman parte de la exposición Diseño industrial en España (Un siglo de creación e innovación) , que será inaugurada hoy por el rey Juan Carlos, cuyo montaje continúa en el jardín del museo, con mobiliario urbano, y una gran sala que muestra 350 objetos de 200 diseñadores fabricados en España a lo largo del siglo XX.

El montaje empieza con sillas de Gaudí y un automóvil Hispano Suiza T49, de 1924, y termina con el teléfono Domo, de Alberto Corazón, del que Telefónica montará nueve millones de unidades. El recorrido, según la intención de los comisarios, Daniel Giralt-Miracle, Juli Capella, Quim Larrea y Pedro Nueno parte de la fórmula «cultura más industria igual a diseño» y avanza hasta el «diseño es futuro» tras la presentación de 350 objetos de 200 diseñadores y otros tantas empresas.El diseño industrial entra por primera vez en un museo nacional, lo que significa una apuesta por esta disciplina y su inclusión en los programas del Reina Sofía y sus colecciones, según declaró ayer su director, José Guirao. «Ha sido un reto lograr este montaje, en el proceso de investigación previo y la recuperación de los objetos». La muestra, organizada por el museo y el Ministerio de Industria y Energía y patrocinada por Telefónica y CASA, viajará después del 31 de agosto a Barcelona, Bilbao, Sevilla, Copenhague y Hannover.

De «acontecimiento para la cultura del diseño» calificó ayer Daniel Giralt-Miracle, comisario general, la exposición de objetos de uso cotidiano que forman parte de la historia del diseño. «El diseño es una disciplina que busca el rigor de la ciencia y la técnica junto con el valor de la estética y la cultura, lejos de la frivolización o las modas pasajeras».

En lugar de presentar un bazar o un gran almacén, los comisarios han elegido, con un afán didáctico, los objetos «que aportan valor a la vida cotidiana». El montaje, realizado por José Juan Belda, abarca sólo diseño industrial, de las diversas comunidades y realizado desde principios de siglo.

Los antecedentes de 1900 a 1930, desde una máquina de coser Alfa a los juguetes Payá, dan paso a las primeras propuestas, de 1930 a 1959, con mobiliario de los Feduchi, Fortuny, Barba Corsini, coches PTV 250 y Pegaso Z-103, moto Lube y lámparas Coderch. Entre los sesenta y ochenta se produce el desarrollo (Carvajal, Fisac, Ricard, motos Montesa, Derbi) que explota hasta los noventa, con Tusquets, Mariscal, Seat Ibiza.

En otros espacios se han situado un audiovisual, con imágenes de NoDo, mobiliario hecho por artistas (Tàpies, Miró, Brossa, Dalí, Pérez Villalta, Mariscal), el desarrollo del nuevo teléfono de Alberto Corazón y el sistema integral de pavimentos de Díaz Magro.