"El peligro de secesión en Italia ha desaparecido con el euro"
"El peligro de secesión ha desaparecido en Italia con el ingreso en la Unión Monetaria Europea (UME)", asegura el vicepresidente del Gobierno italiano, y ministro para Bienes Culturales, Ambiente, Espectáculo y Deportes, Walter Veltroni. Afiliado al desaparecido Partido Comunista, transformado luego en el Partido Demócrata de Izquierda (PDS), rebautizado como Demócratas de Izquierda, Veltroni es un periodista y político de 43 años, empedernido cinéfilo, kennedyano hasta la médula y apasionado forofo de la Juventus de Turín. Veltroni se crece cuando afirma con orgullo: "Italia entrará en la nueva Europa con una coalición que encabeza la izquierda". "Cuando llegamos al Gobierno, no cumplíamos, ninguno de los cinco parámetros exigidos por Maastricht, así que vinculamos nuestra existencia a este objetivo. [El primer ministro, Romano] Prodi nos dijo: 'O entramos en Europa o dimitimos'. El país entendió que se trataba de un reto colectivo. Dos años después, cumplimos esos cinco parámetros. La economía ha retomado el pulso en dos años en los que el Ejecutivo ha tenido que recortar 120 billones de liras (más de 10 billones de pesetas), emprender la reforma de pensiones y la implantación de una tasa europea. Y eso no es popular, pero en esta ocasión los italianos han entendido que merecía la pena", afirma en una entrevista con este diario.
Veltroni confiesa que con la victoria de abril de 1996 tenía mucho miedo de que la izquierda se convirtiera involuntariamente en la responsable de que Italia se quedara fuera de Europa. "Y en aquel momento era bastante probable", reconoce. "Si así hubiera ocurrido, la izquierda se habría despedido de poder gobernar nuevamente durante bastantes años". Pero el vicepresidente italiano no lanza las campanas al vuelo con el nacimiento de la moneda única. "No creo que el euro per se pueda solucionar el problema del paro. Se necesitará una política de mayor solidaridad para erigir la Europa del 2000".
Veltroni resume con estas ideas la tarea que los Quince tienen ante sí para que los fastos de ahora no se conviertan en fiascos futuros: "Hay que desarrollar la Europa de las instituciones políticas. El tiempo y los mecanismos de las decisiones políticas deben realizarse a la misma velocidad que las decisiones económicas y financieras. De lo contrario, habrá contradicciones difíciles de resolver. Además, hay que elaborar una nueva política social que venga de la política del Estado de bienestar. Y, finalmente, construir la Europa del capital humano. Europa podrá competir mundialmente sólo si crea generaciones más cultas, desarrolla más la investigación, revaloriza el medio ambiente...".
Al referirse a la política interna italiana, afirma que el ingreso en la UME y el sistema de autonomía regional de corte federalista que va a regir en su país echará por tierra las veleidades independentistas de la Liga Norte de Umberto Bossi: "El peligro de secesión estaba fundado sobre una esperanza de la Liga: que no entráramos en la UME. De haber fracasado, el peligro habría sido muy serio". "Hace dos años, Bossi proclamaba la República de la Padania. Francamente, hoy no se aprecia ninguna señal de ello".
Sobre la vida del actual Gobierno, el tercero más longevo de los 56 que ha tenido Italia en el último medio siglo, piensa que puede agotar la legislatura (en el 2001) o que al menos dure hasta que el Parlamento promulgue la ambiciosa reforma constitucional.
Sobre el proyecto del Nuevo PDS, Veltroni señala que "se trata de crear una izquierda cultural mente nueva, moderna", que supere las divisiones que ha arrastrado desde la posguerra entre socialistas y comunistas. "Si somos capaces de innovar antes que simplemente sumar fuerzas, tendrémos la posibilidad de continuar creciendo". Pero no quiere hacer parale lismos del Nuevo Socialismo que propugna el primer ministro británico, Tony Blair. Veltroni, que ha venido a España para reforzar los intercambios culturales no quiere hacer ningún comentario sobre la reciente decisión del Tribunal Sumpremo de anular una de las sentencias por corrupción contra el ex líder socialista Bettino Craxi, que se encuentra huido en Túnez. ¿Amnistiar a Craxi? "Hay muchos procesos aún abiertos por casos de corrupción. Este Gobierno no tiene entre sus prioridades ese tema".
Aficionado al fútbol, sobre el que ha escrito un libro, y seguidor de la Juve, el político italiano no da un pronóstico sobre la final de la Liga de Campeones que enfrentará al equipo turinés con el Real Madrid: "Espero que la final sea preciosa y que esté a la altura de la historia de estos dos grandes equípos".
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