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Crisis de identidad

Los jóvenes democristianos chilenos piden una catarsis en su partido

Muchos democristianos han recordado en estos días -después de que 11 diputados de ese partido contribuyeran con sus votos, unidos a los de la derecha, a cerrar la posibilidad de somete a juicio político al general Augusto Pinochet- una advertencia del ya fallecido dirigente Radomiro Tomic. Les solía decir Tomic, que fue candidato presidencial de su partido en 1970, a sus camaradas: "Cuando se gana con la derecha, es la derecha la que gana".La sede de la Democracia Cristiana (DC) continuaba ayer tomada por medio centenar de jóvenes que exigen al presidente de ese partido, Enrique Kraus, que explique su rechazo a la acusación. Mientras tanto, un dirigente de la DC, el ex ministro Genaro Arriagada, afirmó ayer, en una entrevista al diario La Tercera: "En 20 años, nunca hemos estado peor".

Cuestionó Arriagada a los partidarios de acusar al ex dictador que "a veces las buenas intenciones tienen malos resultados" y pidió conceder a Kraus la oportunidad de reestructurar la dirección para crear un cuadro de gobernabilidad en la DC. El ex presidente Patricio Aylwin, cuya afirmación de que sí fuera diputado "votaría que no" a la acusación fue decisiva para el rechazo, sostuvo que, sin embargo, "con el corazón estuve con la acusación", en una entrevista a la revista Hoy.

En la sede de la DC, ocupada desde el jueves, el día de la votación, las críticas son enérgicas. -A la entrada del recinto, cerrada con candados, una pancarta proclama: "Fuera los fascistas". Militantes de la Juventud Socialista que piden al ex ministro Enrique Correa que renuncie al Partido Socialista por, estimar que con su testimonio en la Cámara favoreció a Pinochet fueron ayer a solidarizarse con estos democristianos tras manifestarse en su sede.

También han hecho acto de presencia dirigentes de otros partidos y figuras de la DC como el presidente de la Comisión Chilena de Derechos Humanos, Jaime Castillo, llamado El Maestro por su ascendiente moral. Castillo discrepó de Aylwin al decir que si fuera diputado habría votado a favor de la acusación.

Uno de los líderes de la toma, José Antonio Sabaj, vicepresidente de la juventud de la DC, además de criticar la "traición", pidió a su partido que entable una querella contra Pinochet por los asesinatos democristianos en dictadura. Atribuyó la votación, a que todavía hay "temor a los militares" y advirtió a una DC que se prepara para elegir a su precandidato a las presidenciales de 1999 que si hay democristianos que "votaron por Pinochet, ¿por qué no puede haber otros que voten por [Ricardo] Lagos?", el candidato de los sectores socialistas para esos comicios.

Otro dirigente de la toma, Rodrigo Albornoz, también vicepresidente juvenil de la DC, dijo: "En 25 años más, nos van a decir pinochetistas". Los jóvenes realizan asambleas diarias en la sede ocupada, en las que han llorado militantes al recordar su lucha contra Pinochet, lo que les ha servido de catarsis, y anunciaron que pedirán a la DC que postergue el debate presidencial para definir primero cómo terminar la transición.

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