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CUENTA ATRÁS EN BELFAST

Las negociaciones de paz en Irlanda del Norte progresan hacia un acuerdo histórico

Tony Blair parecía anoche dispuesto a apostar que los viejos adversarios del Ulster van a hacer historia en las próximas horas. Tras una jornada de intensos contactos con políticos protestantes y católicos en Belfast, el primer ministro británico irradiaba optimismo. Pero la manifestación más categórica de que a juicio de Londres las conversaciones avanzan, a pesar de los inmensos obstáculos interpuestos por los protestantes probritánicos del Partido Unionista del Ulster (UUP), la dio la ministra británica para Irlanda del Norte. Cansada, Mo Mowlam declaró: "Hemos logrado progreso en todos los frentes".

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Si la evaluación de los británicos y del Gobierno de Dublín, los copatrocinadores del proceso de paz en el Ulster, resulta correcta, los ocho partidos rivales de la provincia podrían llegar a un acuerdo antes del vencimiento del plazo oficial fijado para esta medianoche. En medios políticos, sin embargo, se especula con que el acuerdo exigiría algunas horas extras, pero existe consenso de que el viernes los irlandeses seguramente entrarán en una nueva fase de su historia.Blair, que se ha instalado en el castillo de Hillsborough para apuntalar personalmente el proyecto de paz, dio a entender que su optimismo está basado en un hecho concreto. El líder británico dijo que había detectado genuina buena voluntad de todas las partes y que esa atmósfera promete un acuerdo.

Calma tras el crimen

Las organizaciones paramilitares protestantes, por su parte, exhortaron a sus filas a mantener la calma tras el asesinato de un supuesto extremista protestante en Londonderry. Trevor Deeney, de 34 años, fue acribillado delante de su mujer por pistoleros enmascarados del llamado Ejército Irlandés de Liberación Nacional (INLA), una facción del IRA opuesta al proceso de paz.El asesinato en una de las jornadas más cruciales del proceso avivó los temores de una ola de represalias paramilitares protestantes, pero Billy Hutchinson, líder del Partido Unionista Progresista (PUP) que representa a grupos armados, formuló un llamamiento a la serenidad. "No debemos permitir que este crimen avive el terrorismo del INLA", dijo. Gary McMichael, del Partido Democrático del Ulster (UDP), hizo lo propio afirmando que "los enemigos del proceso de paz quieren maximizar sus esfuerzos para destruir el país".

Mowlam resumió el sentímiento de la gran mayoría de los negociadores que permanecían anoche encerrados en un, moderno edificio ayacente al castillo de Stormont cuando afirmó que asesinato, en lugar de hacer descarrilar el proceso, "no hace sino reforzar" su "determinación de lograr una solución política".

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Blair y su colega irlandés Bertie Ahern sostuvieron ayer una serie de reuniones con negociadores de ambos bandos en un dramático esfuerzo por impedir el colapso del proceso. Ambos sostuvieron entrevistas separadas con David Trimble, el líder del UUP que el martes provocó una crisis rechazando el plan de paz elaborado por el ex senador norteamericano George Mitchell. Para David Trimble, el plan, contenido en una carpeta de 65 páginas, entraña concesiones inaceptables que favorecen a la minoría católica del Ulster. Acusando a Mitchell y, por ende a Londres y Dublín, de adoptar la agenda republicana, el UUP dijo que rechaza "todo intento por usurpar los derechos democráticos de los unionistas de Irlanda del Norte".

Futuro referéndum

El plan, que sentará las bases para nuevas negociaciones con miras a la convocatoria de un referéndum decisivo para el futuro político de Irlanda del Norte el próximo mes, propone la creación de una Asamblea Legislativa con sede en Belfast, así como de instituciones que regularían las relaciones entre la predominantemente católica República de Irlanda y el norte de la isla, de mayoría protestante. Blair, que al embarcarse en su más ambiciosa y arriesgada empresa política dijo que sentía ''la mano de la historia sobre [sus] hombros", intensificará hoy su empeño por impedir que el rechazo protestante torpedee el proceso de paz. "Existen todavía muchas cuestiones bastante difíciles de resolver. Pero heme aquí, decidido y lleno de ideas", dijo.

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