La ausencia de Turquía ensombrece la cumbre europea sobre la ampliación

La ausenencia de Turquía está destinada a ensombrecer la Conferencia Europea que se inaugura hoy en Londres para consolidar la expansión de la UE hacia los países del Este. Los anfitriones británicos de una reunión que debía superar una de las más recientes y agrias disputas políticas con Ankara intentaban anoche minimizar el efecto del resentimiento turco, que quedará elocuentemente ilustrado con la silla vacía del presidente Suleimán Demirel.

La cita de jefes de Gobierno de los Quince junto con la presencia de líderes de las 11 naciones que aspiran a integrarse en la Unión, amenaza con resultar un acontecimiento embarazoso para Londres, actual sede de la presidencia rotativa de la UE. Con todo, la reunión será festejada como un simbólico triunfo de Polonia, Hungría, la República Checa, Eslovenia, Estonia y Chipre, que comenzarán a negociar su ingreso a la UE a finales de este mes. Bulgaria, Rumania, Letonia, Lituania y Eslovaquia harán lo propio posteriormente. Pero ni siquiera se ha fijado plazo para considerar las aspiraciones europeístas de Ankara.

El resentimiento turco parece destinado a dar un tono ácido a esta reunión europea, que el Gobierno de Ankara boicotea en protesta por lo que percibe como un "tratamiento discriminatorio" por parte de los Quince. Los musulmanes turcos, cuyo ingreso a la UE es vetado principalmente por Alemania, acusan a Bonn de capitanear un movimiento diplomático que busca crear un "club cristiano" en Europa.

Negociación con Chipre

La actitud turca amenaza también con complicar las futuras negociaciones de Ankara en el concierto europeo y reabrir el viejo y complejo debate sobre Chipre. Acordada por los líderes de la UE el pasado 13 de diciembre en la cumbre de Luxemburgo, la Conferencia Europea de Londres intentará sentar las bases para la creación de un foro de países con deseos de integrarse a la Unión. Pero consciente de las dificultades políticas que el proyecto implica, sobre todo a causa de la disputa con Turquía, el Gobierno británico ha conseguido modificar la agenda: las dicusiones que se desarrollarán a lo largo de la jornada abarcarán temas tan diversos como la lucha contra el crimen organizado, la defensa del medio ambiente, los sistemas de cooperación económica y, por último, la crisis de Kosovo.España, que estará representada en Londres por el presidente del Gobierno, José María Aznar, y el ministro de Exteriores, Abel Matutes, es partidaria de incluir a Turquía entre los candidatos a la integración en la UE, aunque exige también que Ankara cumpla las condiciones democráticas y económicas que se exigen a todos los aspirantes.

[Francia lanzó ayer una invitación de última hora a Turquía para que se sume a los trabajos de la Conferencia, aunque sea "más adelante", según dijo la portavoz de la presidencia de la República, Catherine Colonna, informa France Presse.]