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La flota arrastrera vuelve a Marruecos tras dos meses de paro biológico

Los 121 barcos de pesca que faenan al arrastre en aguas de los caladeros de Marruecos pusieron punto final en la madrugada de ayer a dos meses de amarre forzoso, provocado por el tiempo de parada biológica que para la regeneración del caladero marca el acuerdo pesquero suscrito entre la Unión Europea y el país norteafricano.Según declaró Pedro Maza, presidente de los armadores andaluces, "la mayoría de barcos afectados por el paro, que se inició el 1 de enero y que ahora finaliza, pertenecen a los puertos de Huelva, Málaga, Almería y Algeciras (Cádiz), donde se han generado grandes pérdidas en estos dos primeros meses del año por la reducción en la venta del pescado en lonjas".

Maza subrayó la falta de reciprocidad que, una vez más, ha demostrado Marruecos durante este paro, ya que según el presidente de los armadores "la flota marroquí sigue sin cumplir esta parte del convenio".

La flota de arrastre, que se hizo a la mar con destino al banco subsahariano, ha mantenido en paro a 1.200 personas del sector extractivo en toda Andalucía, lo que no representa ni la mitad de los afectados en el conjunto del sector pesquero. Por cada marinero, son seis personas del sector subsidiario las que también padecen este apartado del convenio pesquero Unión Europea-Marruecos.

"A las pérdidas que para el sector pesquero genera el paro hay que sumar este año las acumuladas en noviembre y diciembre de 1997 a causa de los temporales que azotaron la zona del Estrecho, por lo que la situación es delicada", manifestó Manuel Blanco, patrón mayor de la Cofradía de Pescadores de Algeciras.

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