El PNV consigue que Euskadi gestione parte del fondo de formación del Inem

El PNV ha conseguido que la formación continua (la parte del fondo de formación del Inem que afecta a los trabajadores en activo) se gestione de manera autónoma a través de las cuotas de trabajadores y empresarios recaudadas en el País Vasco. Este logro autonómico, exclusivo de Euskadi, se plasmó ayer a través de una enmienda respaldada por todos los partidos y se votará hoy en el pleno del Congreso. La enmienda garantiza al País Vasco la gestión de estas cuotas a través de una fundación, denominada Obetus, integrada por las centrales sindicales y empresariales vascas. En 1997, el importe de estas cuotas de formación continua asciende a 3.800 millones de pesetas. La fórmula de gestionar la formación continua a través de una fundación es específica del País Vasco.

Con el acuerdo de ayer, el Gobierno del PP cumple un compromiso alcanzado con el PNV en el pacto de investidura de abril de 1996; un pacto que fue ratificado posteriormente a través de un protocolo firmado por el lehendakari, José Antonio Ardanza, y el ministro de Trabajo, Javier Arenas. En el pacto de abril de 1996 el PNV introdujo además la reclamación de la cuota de formación del Inem para políticas pasivas, es decir, las que afectan a los parados. El Gobierno se ha negado a esta reclamación con el argumento de que rompería la caja única de la Seguridad Social.

Fuera de los presupuestos

Según la enmienda acordada ayer, a partir del año que viene las cuotas de formación continua recaudadas a los trabajadores y empresarios del País Vasco se gestionarán desde esa comunidad. Y esas cantidades ya no figurarán en los presupuestos generales del Estado sino en los del Inem, que cederán la gestión a la fundación creada en Euskadi. La enmienda dice expresamente: "El importe de la cantidad figurará en el presupuesto del Inem para financiar los planes de formación continua en las administraciones públicas y aquellos que sean fruto de cualesquiera otros acuerdos".El Ejecutivo vasco asegura que esta fórmula, por la que el Inem vasco recauda las cuotas y las gestiona una fundación, tendrá un carácter provisional hasta que cierren con el Gobierno del PP el polémico acuerdo sobre el traspaso de las cuotas de formación del Inem que afectan a los parados de Euskadi. El Gobierno vasco valora políticamente la enmienda de ayer como un primer paso en esa dirección. Si se cerrara un acuerdo, en estos momentos imprevisible, sobre el traspaso de las cuotas de formación del Inem, la fórmula definitiva sería la regulación de todo el paquete de formación a través del concierto económico.

Las conversaciones sobre este polémico traspaso continúan en sordina. El vicepresidente económico, Rodrigo Rato, confirmó hace escasos días que el diálogo entre las administraciones central y vasca continúa. Pero la negociación sobre esta cuestión se mantiene en silencio para evitar reacciones de otras autonomías, como Cataluña, que reclamó el traspaso de las cuotas de formación del Inem si el Ejecutivo vasco lo acordaba con el Gobierno.