Romay rechaza las pruebas genéticas indiscriminadas sobre el Alzheimer

El ministro de Sanidad y Consumo, José Manuel Romay Becaría, advirtió ayer en Pamplona de que la utilización indiscriminada de las pruebas genéticas para diagnosticar el Alzheimer "puede generar un elevado nivel deinseguridad e incertidumbre, ante un riesgo no seguro de padecer la enfermedad". Romay, que asistió a la apertura de un congreso nacional sobre el Alzheimer, señaló, no obstante, el gran valor que tendrá en el próximo futuro el diagnóstico precoz.

Durante la primera jornada de la Conferencia Nacional de Alzheimer, organizada por la Universidad de Navarra, Romay Beccaría se hizo eco de las recomendaciones de expertos estadounidenses publicadas en la revista JAMA, de la Asociación Americana de Medicina, en las que, dijo el ministro, "se hace un llamamiento a la prudencia en la utilización de las pruebas genéticas, recomendando su aplicación con carácter conservador y, en todo caso, reservado, en aquellos casos en los que no existan antecedentes familiares.El ministro de Sanidad añadió que utilizar de forma indiscriminada este tipo de pruebas predictivas "en personas asintomáticas o que no presentan criterios claros, de acuerdo con las recomendaciones de los expertos, puede generar un elevado nivel de inseguridad e incertidumbre ante un riesgo no seguro de padecer la enfermedad.

No obstante, el ministro reconoció el enorme potencial que tendrá el diagnóstico precoz de esta enfermedad en un futuro inmediato "en la medida en que las investigaciones actualmente en marcha nos aporten nuevos datos".

18 millones de casos

En la Conferencia Nacional de Alzheimer se han reunido más de 1.000 profesionales españoles de las áreas sanitarias, de bienestar social e investigación básica junto a representantes de las administraciones y de las asociaciones de familiares de afectados por esta patología, que suman 18 millones de casos en todo el mundo.Amalia Gómez, secretaria general de Asuntos Sociales, anunció que el ministerio al que pertenece negocia en la actualidad con el Ministerio de Economía y Hacienda la elaboración de una ley de protección a la dependencia, en la que se recogerán nuevos sistemas de ayuda a los cuidadores de enfermos en atención domiciliaria y a las familias afectadas. Gómez adelantó que la ley contemplará fórmulas de desgravación y bonificación fiscal no sólo para las demencias causadas por el Alzheimer, sino para todas las dependencias físicas o psíquicas provocadas por la demencia senil. "Es evidente que el 5% de los recursos económicos destinados al Alzheimer dentro del actual plan gerontológico nacional son muy poco dinero", reconoció Gómez.

José Manuel Martínez-Lage, director de la Unidad de Alzheimer de la Clínica Universitaria de Navarra y coordinador de la conferencia, reivindicó la necesidad de seguir investigando sobre el origen y desarrollo de la enfermedad y de mejorar la atención especializada y económica a las asociaciones de apoyo y a los familiares de los enfermos.