Los cineastas niegan que haya relación causal entre la política del PP y el crecimiento del cine
Uribe y Gómez Pereira afirman que sus filmes, y otros, son la única razón del avance
La semana pasada se conocieron nuevas cifras de la situación del cine español tras subida del PP al poder. Sin cambios de consideración en la segunda mitad del año pasado -la cuota de mercado se mantuvo alrededor del 10%- en enero de 1997 y, por indicios fiables, en los meses siguientes se estima que el porcentaje aumentó hasta el 17%. Cultura esgrime este salto como fruto de su gestión; pero los cineastas -entre ellos Manuel Gómez Pereira e Imanol Uribe, productores decisivos en este súbito crecimiento- niegan que tal salto tenga su origen en la política del PP.
Los datos de enero, (contrasta dos) y de febrero a mayo (estimativos, pero fiables) dejan ver que se ha producido un aumento de entre 5 y 7 puntos en la cuota del cine español en el mercado interior. Hace una semana (véa se El PAÍS, 25 de junio), el Secretario de Estado de Cultura, Miguel Ángel Cortés, esgrimió este salto ("La situación del cine ha mejorado desde la llegada del PP al Gobierno") como efecto de la gestión del Gobierno.Una decena de cineastas con sultados lo niegan de forma rotunda: "Cultura riada tiene que ver con ese crecimiento", es el re sumen unánime de, una encuesta a vuela pluma. El salto, dicen los consultados, lo desencadenó El amor perjudica seriamente la salud, de Manuel Gómez Pereira, que llevó al cine a más de un mi llón de espectadores. Afirma Gómez Pereira: "Me niego a aceptar que- esa cifra mágica del 17 % de cuota de merca do corresponda a una política cinematográfica coherente, consistente, inteligente". Y añade: "Se debe solamente al esfuerzo crea tivo individual y circunstancial de algunos productores, directo res, guionistas, distribuidores y exhibidores que creen en el cine español como algo que puede ser rentable y prestigioso".
Al arrastre del Filme de Gómez Pereira, siguieron la multitudinaria recuperación de Tesis tras su triunfo en los Premios Goya, el éxito contra pronóstico de El perro del hortelano y un nuevo gran tirón de espectadores -ha superado en tres meses los 800.000- creado por Secretos del corazón tras su triunfo en el ,festival de Berlín. Su productor, Imanol Uribe, afirma que lo esgrímido por Cultura "suena a apropiación indebida, ya que esta situación favorable se debe exclusivamente a la buena marcha de cuatro o cinco películas que han sabido combinar magníficamente la calidad con la aceptación por el público". Y añade: "El que de vez en cuando surjan películas de este tipo depende exclusivamente de sus creadores y no de la Administración. Otra cosa sería", añade el cineasta, " que se hubieran creado condiciones para que la cuota de mercado se estabilizara al alza por el conjunto de la producción, no por sus excepciones
A la afirmación de Cortés de que "la proteción siempre la piden los débiles", Gómez Pereira replica: "No hagamos demagogia, la protección no la piden los débiles, no somos mendigos. Protección significa no tener una industria enferma. Defender nuestra cultura, nuestra identidad es algo a lo que no debemos renunciar". Y concluye que "no es justo aprovecharse del éxito de algunas películas (a las que paradógicamente se penaliza según la nueva ley) para rentabilizar la política del Gobierno. ¿Qué pasará en el 98 si dos o tres películas españolas no arrastran a las salas dos o tres millones de espectadores?"
Uribe y Gómez Pereira, desde distinto ángulo, confluyen en esta ambición de fondo: que el cine español supere la dinámica de extinción o, en el mejor de los casos, de supervivencia, en que está atrapado, y entre en una dinámica de crecimiento y consolidación. Para Uríbe hay que crear condiciones para mantener la cuota de mercado al alza "por el conjunto de la producción y no por sus excepciones", lo que traducido a la visión de Gómez Pereira -el otro productor desencadenante de este salto que ahora intenta capitalizar, sin haber movido un dedo, Cultura- es la puesta en marcha "de una industria no enferma", cuya creación asocia con la defensa de nuestra cultura e identidad.
Babelia
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