Aguirre cifra en 230.000 millones el coste de las transferencias educativas

El Gobierno considera que las 10 comunidades que aún no tienen competencias educativas no universitarias necesitarían 230.000 millones de pesetas suplementarios, distribuidos en un plazo de cinco años, para asumir las transferencias en buenas condiciones. La ministra de Educación, Esperanza Aguirre, aseguró ayer en el Senado que este plan quinquenal garantiza una "implantación óptima" de la reforma. La mayor parte de este dinero sería destinado a la educación secundaria obligatoria (ESO), el bachillerato, y la formación profesional, con un incremento de 5.000 profesores, a pesar de la caída demográfica (estimada en unos 700.000 alumnos de 3 a 18 años en el territorio gestionado por el Ministerio de Educación).

El Gobierno concreta de este modo su oferta a las comunidades, que aún no han precisado el monto definitivo de sus demandas. Según los cálculos manejados por los socialistas, las necesidades autonómicas rondarían los 150.000 millones si se afrontaran en un solo año. Teniendo en cuenta la diferente forma de estructurar cronológicamente esta inversión suplementaria, no es posible por el momento establecer si la oferta gubernamental satisfará las exigencias de las comunidades. En todo caso el Ejecutivo asume que la implantación definitiva de la LOGSE se retrasará hasta el 2002.

El secretario general de Educación, Eugenio Nasarre, que ayer compareció en el Congreso, relacionó el cumplimiento de este plan financiero con la buena evolución de la economía y el adecuado saneamiento de las finanzas públicas. Nasarre anunció que las ponencias técnicas Gobierno-comunidades comenzarán a reunirse a finales de este mes.