Nuevo sistema mundial para controlar los derechos de autor

La Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI) -integrada por todos los países desarrollados y la mayor parte de los en vías de desarrollo- se propone dar un cambio sustancial a la gestión de los derechos de autor en las principales industrias de la cultura con la adopción del nuevo sistema llamado Matrícula.

Se trata de un identificador digital que permitirá conocer, entre otras cosas, el número de veces que se reproduce una canción o una película. "De este modo un autor del pueblo más recóndito de España podrá saber que su canción o su película se ha utilizado en cualquier discoteca, radio, televisión o página Web de Internet de cualquier lugar del mundo", dijo ayer Teddy Bautista, vicepresidente y consejero delegado de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE).

Un acuerdo sobre el nuevo sistema, que ya se usa en los DVD (Discos Versátiles Digitales), será adoptado en el Forum Internacional sobre Derechos de Autor y Derechos Conexos que se celebra en Sevilla mañana y pasado. Se trata de una reunión de la OMPI patrocinada por la SGAE y por el Ministerio de Educación y Cultura.

Fotografias, cuadros, diseños infográficos, obras discográficas, cinematográficas y audiovisuales llevarán un código identificador, "algo así como el ADN de la obra", en palabras de Bautista, que permitirá a las entidades de gestión de derechos de autor, como la SGAE, la posibilidad de defender con una gran precisión las obras creativas y a sus autores.

En el código de identificación de cada obra figuran datos sobre el autor, quién la comercializa y quién la administra. Este código deja un rastro a su paso que es detectado y controlado. Los elementos humanos de control son sustituidos por elementos técnicos.