Los Foo Fighters rompen sus lazos con Nirvana en un nuevo álbum
El ex batería de Kurt Cobain, Dave Grohl, consolida su banda
Dave Grohl ha pasado de ser el batería de Nirvana a liderar su propio grupo como cantante y guitarrista. El primer álbum de The Foo Figh ters fue hecho prácticamente por él solo. El segundo, que sale el 12 de mayo, es, según Grohl, un trabajo de grupo. Sin embargo, él ha volcado todos sus demonios personales. "Quería que las letras tuvieran la misma intensidad que la música", afirmó ayer en Madrid.
Dave Grohl no rehúye estar en primer plano, pero se expresa sin poses de estrella. "Sigo en esto porque me gusta estar en una banda, y no por el dinero o la fama", dijo. "No me hace falta más dinero. Llevo formando parte de distintos grupos desde que tenía 12 años y durante el año que estuve sin formar parte de ninguno [tras la muerte de Kurt Cobain, cantante de Nirvana], me sentí perdido".La formación de Foo Fighters lo llevó desde el fondo del escenario, tras la batería, a un primer plano. "Ser batería es fácil, no tienes que dar ruedas de prensa, nadie te reconoce y no eres el portavoz", afirma.
La aventura del nuevo grupo lo cambió todo. "Después del primer disco de Foo Fighters, en el que hice casi de todo, me ha resultado mucho más sencillo volver a compartir las tareas con los otros miembros de la banda. Es como pelear tú solo contra un millón o hacerlo acompañado por otros tres", dijo.
Lo cierto es que, a pesar del éxito que tuvieron con su primer álbum, se sintieron algo desbordados. "Las cosas crecieron demasiado rápidamente", afirma ahora. "Sólo habíamos ensayado un par de meses antes de emprender la gira y teníamos sólo las canciones del primer álbum con 14 o 15 temas. Al final de la gira nos sentíamos bastante limitados por todo eso y decidimos que era hora de meternos con el segundo disco y ampliar nuestro repertorio".
El nuevo álbum, The colour & the shape, es para ellos la consolidación del grupo. "Nuestro primer álbum fue muy apresurado. Fue hecho en cinco días por una persona, éste ha sido realizado en tres meses de estudio por cuatro personas. El primero fue como una maqueta, éste es el álbum que Foo Fighters realmente quería hacer".
Los seguidores de la banda podrán encontrar la misma energía que en el primero, aunque en éste han optado por cierta experimentación. "Seguimos haciendo un rock con garra, pero, en algunos temas damos de pronto unos giros inesperados. Una dulce melodía puede ser forzada hasta los límites de la ridiculez, por el gusto de deformarla. Hemos querido llevar nuestra música hacia áreas inexploradas".
Las letras de las canciones son bastante más personales y Dave Grohl ha volcado en ellas su mundo interior. "Antes temía expresar claramante lo que sentía y mis letras eran más oscuras e imprecisas. Pero en este álbum son muy reveladoras. Decidí contar mis secretos para poder cantar con el alma. La intensidad de la música pedía algo así. Ha sido una experiencia liberadora".
Babelia
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.