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Investigan en Valencia la muerte de una niña en una clínica privada

Marina Ocaña Gisbert, de 4 años, falleció en la madrugada de ayer en el Hospital General de Alicante, donde ingresó en estado de coma profundo tras sobrevenirle dos crisis convulsivas por causas que todavía se desconocen. Los padres de la pequeña han demandado a la clínica privada por negligencia, mientras las autoridades sanitarias han abierto una investigación oficial. La operación se incluyó en el plan de choque puesto en marcha por la consejería de Sanidad para reducir las listas de espera.

Los padres de la pequeña, Pedro y Michele, aseguran que su hija no recibió la asistencia adecuada y que el centro hospitalario privado adonde fue desviada [por la Consejería de Sanidad] no disponía de personal y medios adecuados para hacer frente a eventualidades, por lo que ayer mismo presentaron una demanda en el juzgado de guardia.

Los responsables de la clínica aseguran que la niña recibió el tratamiento adecuado, mientras la consejería de Sanidad anunció una investigación oficial para esclarecer los hechos "hasta el final".

Marina Ocaña ingresó en la mañana del viernes en la clínica Mare Nostrum para ser intervenida de anginas y vegetaciones. A las 12,30 horas la operación había finalizado, y media hora después fue trasladada a su habitación, "consciente y resuelta", según informó ayer el director médico del centro, José Luis Prats. "No hubo negligencia, la intervención resultó positiva, la anestesia se administró sin problemas, y la niña presentaba un curso evolutivo normal", apuntó Prats.

La madre de Marina observó que algo fallaba en el postoperatorio. La familia asegura que empleó más de cinco horas en conseguir que un facultativo reconociera a la pequeña, y sobre las 7 de la tarde, "nos dijo que su estado era normal". La clínica asevera que la paciente no presentaba patología alguna.

Segundo caso

Entrada la noche, a las 22,30 horas la pequeña empezó a temblar, su temperatura corporal descendió a los 35 grados y la tensión era baja, según los padres. Una hora después le sobrevino una crisis convulsiva por causas "desconocidas". Esta es la segunda ocasión en la que un paciente operado en una clínica privada acogida al plan de choque, ideado por el Consell para reducir las listas de espera, fallece en extrañas circunstancias.En su comparecencia en las Cortes el pasado 25 de febrero para dar explicaciones sobre las circunstancias que provocaron la muerte de Justa Alarcón -fallecida en octubre, 18 días después de ingresar en la clínica San Jorge de Alcoy -, el consejero de Sanidad Joaquín Farnós y el PP acusaron a la oposición de recurrir al "terrorismo parlamentario" y de "utilizar un muerto con fines políticos, en un intento de alarmar al usuario, diciéndole que no utilice los hospitales privados".

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