Gallardón concede un permiso matrimonial a dos lesbianas

Ana Segura e Isabel Fernández preparan las maletas para su luna de miel. La Comunidad de Madrid, presidida por Alberto Ruiz-Gallardón, del PP, ha concedido a Ana, trabajadora de la Consejería de Educación, el permiso de 15 días libres que había pedido tras inscribirse con su novia, Isabel, en el registro de parejas de hecho de esta administración autonómica. La licencia llega días después de que el PP, con CiU y Coalición Canaria, rechazara en el Congreso la admisión del proyecto de ley de Parejas de Hecho.

Isabel y Ana han tenido una pequeña recompensa por atreverse a salir del armario. Después de casi un año de convivencia, el pasado 20 de febrero se animaron a casarse. Con ilusión, pero sin tul, vestidas de paisano, se presentaron en la sede de la Comunidad de Madrid y se inscribieron en el registro de parejas de hecho de la región madrileña, instaurado por el antiguo Gobierno regional del PSOE y que ha sido mantenido por el actual Ejecutivo autonómico del PP. Se trataba de un acto reivindicativo, de proclamación orgullosa, de su convivencia marital como lesbianas.Consecuentemente, tras la boda, Ana, el único miembro de la pareja que trabaja fuera de casa, dado que Isabel permanece en el domicilio conyugal cuidando del anciano padre de su compañera, solicitó el correspondiente permiso de vacaciones por matrimonio a su empresa. A pesar de que el convenio de los trabajadores -de la Comunidad de Madrid, donde Ana presta sus servicios como personal laboral, estipula la equiparación de las parejas de hecho con los matrimonios en cuanto a derechos laborales, ni Ana ni Isabel se hacían demasiadas ilusiones.

"Era rizar el rizo de la reivindicación, ponerles en la tesitura de enfrentarse con una petición real de una pareja homosexual real, para ver si la letra del convenio tenía una aplicación práctica o no, pero sin muchas esperanzas, la verdad", recuerda Ana. Sin embargo, la flauta iba a sonar.

Todavía no se habían repuesto de "la indignación" de asistir "al espectáculo lamentable" del rechazo en el Congreso de la toma en consideración de la ley de Parejas de Hecho, cuando Ana recibió en mano, el pasado viernes, la notificación de la concesión de su licencia por matrimonio. "Es una noticia esperanzadora, y que demuestra que la sociedad civil va por delante de las Cortes en este asunto", comentan Isabel y Ana quienes, sin embargo, no pueden evitar denunciar las paradojas de que, con este respaldo institucional a su pareja, van a ser objeto en el futuro.

"Ahora resulta", relatan divertidas, "que somos como un matrimonio de ocho a tres, que es el horario de Ana, cuya empresa así se lo ha reconocido, y sólo en Madrid, que es donde estamos registradas. O sea, que somos una familia a tiempo parcial y limitada en el espacio. Este absurdo tendría que bastar para mover a la reflexión"

Paso adelante

El Colectivo de Gays y Lesbianas de Madrid (Cogam) ha acogido con satisfacción el permiso. "Aunque es una cuestión de un convenio determinado, sin aplicación general, puede servir para que otros ho.mosexuales se animen a pedir estos derechos y forzar a sus empresas y a las Administraciones a asumirlos", dijo ayer Miguel Brox, de Cogam.Mientras eso ocurre, Ana e Isabel prefieren la acción y ya tienen preparada su próxima aventura: presentarse en la Seguridad Social y solicitar la inclusión de Isabel en la cartilla de Ana. "Si somos un matrimonio, que sea para todo".