El líder del PSOE considera "inevitable" un recorte del gasto público a mediados de este año

El ex presidente del Gobierno Felipe González advirtió ayer que a mitad de año puede ser "necesario e inevitable hacer un ajuste presupuestario", es decir, un recorte de gasto público en el Presupuesto del Estado para 1997."Tendremos la típica pelea política. Pero ya digo que puede ser necesario hacer el ajuste", dijo. González no se exten dió en lo! motivos que harán necesario el recorte de gasto para cumplir el objetivo de déficit público. Se limitó a decir que la economía europea no está creciendo al ritmo esperado. "No veo con claridad que la situación en la primavera de 1998 sea ni políticamente ni económicamente mejor que la que tenemos ahora o tendremos en junio o septiembre en los principales países de la UE".

El ministro de Industria, Josep Piqué, declaró más tarde: "No creo que el ministro de Economía se esté planteado un ajuste presupuesario [ ... ] Los datos evolucionan bien".

El Presupuesto del Estado para 1997 fue aprobado por el Parlamento en noviembre pasado y prevé un aumento de los ingresos del 6%, basado en un crecimiento económico del 3%. 1996 se cerró con un crecimiento económico del 2,2%, una décima por debajo de la previsión del Gobierno.

"Te equivocas, Jordi"

Por su parte, el presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, criticó en presencia de González el tipo de cambio con que el Gobierno decidió en 1989 la entrada de la peseta en el sistema monetario europeo (SME), de 65 pesetas por marco. El propio Pujol admitió que él no lo criticó entonces, aunque sí lo hizo un tiempo más tarde.González no le contestó en público, pero lo hizo en el descanso del acto. "Te equivocas, Jordi, te equivocas", le dijo a Pujol. Quien sí contestó a Pujol en público fue el ex secretario de Estado de Hacienda Antoni Zabalza. Aseguró que el error no fue entrar con una peseta alta, sino no haber sido capaces luego de mantener una inflación reducida.

Pujol advirtió, por su parte, que hay que estar atentos al valor de la lira, ya que puede afectar a la peseta. Defendió la liberalización del suelo, pero insistió en que las reformas no deben ser "salvajes".