La policía evita incidentes en el traslado nuclear de Alemania

El fuerte dispositivo policial logró que la primera etapa del mayor transporte de residuos nucleares de la historia alemana transcurriera sin graves incidentes. Los seis contenedores, con 780 toneladas de basura radiactiva, fueron depositados en la madrugada del sábado en una central térmica de Walheim. De allí saldrán en tren mañana hacia el cementerio nuclear de Gorleben, en la Baja Sajonia, adonde deben llegar el miércoles. Mientras, unas 12.000 personas protestaban pacíficamente en Lüneberg, donde mañana se espera la llegada del tren.Los, 600 kilómetros de vía permanecian ayer estrechamente vigilados Se calcula que el Gobierno del cariciller Kohl ha movilizado casi. 30.000 policías. La prensa hablaba ayer del mayor despliegue desde la guerra.

Los mayores problemas se esperan, sin embargo, para los próximos días. La fiscalía de Lüneberg confirmó ayer la prohibición de las manifestaciones a partir de mañana junto a la vía. En Gorleben descansarán los residuos hasta que se decida su enterramiento definitivo. El Gobierno desmintió una información de la revista Der Spiegel, según la cual Kohl habría acordado ya la construcción de un cementerio nuclear en el sur, a lo que se oponen incluso los políticos democristianos.