Icíar Bollaín revela en un libro los secretos de rodaje de Ken Loach

En 1994 lcíar Bollaín se presentó a la selección de actores para Tierra y libertad con la idea de echar por lo menos una mirada a su admirado Ken Loach. No sólo fue contratada para actuar en esa película, sino que después de terminarla surgió la oportunidad de escribir un libro sobre el siguiente proyecto del director británico: La canción de Carla. Así surgió Ken Loach: un observador solidario (El País-Aguilar), que fue presentado ayer en Madrid.

lcíar Bollaín, que, con 29 años, tiene ya marcada una sólida carrera como actriz y directora, se vio de pronto enfrentada a la labor de escritora. "Me costó bastante escribir este libro", dice, "pero sobre todo porque tuve que meter mucha información sobre Ken Loach, citas de declaraciones suyas en entrevistas y datos sobre sus anteriores películas".

El rodaje en Escocia y Nicaragua duró cuatro semanas. Bollaín fue un testigo de excepción, porque el director de filmes como Lloviendo piedras, La agenda oculta y Ladybird, Ladybird no suele admitir extraños en los rodajes. "Durante el día tomaba notas y por la noche escribía una especie de diario", relata.

Un diario

lcíar Bollaín insiste en que este libro es un diario de rodaje aunque no se atenga a la fórmula de fragmentos fechados. "He escrito este libro muy a mi aire", dice. "Ken Loach me permitió hacerlo sin ningún tipo de condiciones o de ayuda especial. Disfruté de toda la libertad y la responsabilidad que eso implica".Loach es uno de los directores más comprometidos con la sociedad de nuestra época, y también uno de los más secretos. "Tiene una personalidad muy privada. No es muy hablador y está totalmente pendiente de su trabajo", dice Bollaín. "Ken Loach tiene un gran respeto por la realidad. En sus películas supedita siempre la ficción a la realidad. La experiencia que tuvimos durante el rodaje fue muy intensa. Llegamos a un país en plena ebullición, lo de menos parecía ser el rodaje de una película. Fue apasionante hablar con la gente que había vivido la revolución. Te sientes muy pequeño junto a ellos, ante la verdad y la fuerza que muestran".

Bollaín siente que la cercanía con Loach y el ser observadora de este "observador solidario" han tenido influencia en su trabajo. "Terminé el guión de Hola, ¿estás sola? después de hacer Tierra y libertad. Eso me llevó a cambiarlo un poco y modelar los personajes bajo un filtro más realista".

Son pocos los libros que se escriben sobre directores de cine contemporáneos, pero Bollaín no lo lamenta del todo. "Antes había más libros y revistas de cine. Ahora las revistas son más gráficas y de contenido más superficial, pero se ha ganado mucho en público. Hay una especie de glamour que se había perdido. Pero estaría bien que se escribieran también libros o artículos más reflexivos".