Los funcionarios colombianos se echan a la calle contra Samper

, La política económica del presidente Ernesto Samper está sufriendo los embates de la calle en Colombia. En medio de la tensión generada por las denuncias hechas por el propio Gobierno sobre infiltración guerrillera y el temor también a que la situación degenere en una bucaramización, ayer comenzó el paro indefinido de unos 300.000 trabajadores estatales en todo el país.

Más de 30.000 personas se reunieron en la plaza principal de Bogotá, donde un grupo de unos 200 manifestantes, armados con palos y piedras, se enfrentó violentamente con la policía cuando los agentes trataron de detener a un joven.

El conflicto tiene orígenes económicos. Los salarios, que sólo crecieron el ano pasado un 13%, cuando la inflación pasó del 21%, y la privatización de empresas estatales son los puntos centrales en los que Gobierno y trabajadores no llegaron a un acuerdo.

Pasadas dos horas del comienzo de la huelga general, el Gobierno daba un parte de normalidad. Los trabajadores, por su parte, reportaban éxito. "La parálisis en las entidades oficiales es casi total en todo el país", dijo a este diario uno de los dirigentes de la protesta. Las ciudades permanecieron militarizadas, y cuatro puntos claves cercanos a Bogotá fueron bloqueados por carros de combate.