Hollywood prepara el lanzamiento de 12 de las películas mas caras de su historia
'Titanic', de James Cameron, costará entre 16.000 y 24.000 millones de pesetas
La apuesta es a doble o nada. A comienzos de 1997, la escalada de presupuestos del cine de Hollywood ha llevado a los grandes estudios a un nuevo máximo, a una batalla feroz por la taquilla. La cita es este verano, cuando se espera el estreno simultáneo de una docena de superproducciones aún más caras que Waterworld: el coste medio no baja en ningún caso de los 100 millones de dólares (13.000 millones de pesetas). La fórmula es archiconocida, aventuras más efectos especiales, pero introduce una novedad: la puesta al límite de las propias estructuras de la industria.
Enzarzado en una cruzada comercial sin retorno cada vez más alejada de criterios artísticos, Hollywood anuncia ya, a varios meses vista, El mundo perdido (primera secuela de Parque Jurásico), Alien 4 y Speed 2: Cruise Control como algunos de los títulos más importantes de un año clave para la industria. Pero hay más. Y más caro. El director de Terminator, James Cameron, está terminando Titanic, su versión de ese desastre marítimo, y se ha gastado en ella hasta la fecha, según la revista Entertainment Weekly, entre 125 y 180 millones de dólares (de 16.000 a 24.000 millones de pesetas). Se espera que esos costes crezcan de aquí a su estreno, en julio. Dos estudios, Fox y Paramount, han tenido que aliarse para sufragarlo, ya que además de los efectos digitales, Titanic incluye el me traje de una visita submarina del propio Cameron al lugar donde está hundido el trasatlántico.El verano pasado, mientras se hacían las predicciones cinematográficas de la temporada, se advertía al público que aquello era sólo un aperitivo, que lo bueno llegaría ahora, en 1997. E cine americano es experto en crear expectación lanzando al aire nombres famosos y cifras desorbitadas. Pero no es exagerado decir que el momento actual es una importante meta volante en la carrera de los estudios hacia el año 2000.
El cronista de Hollywood Bernard Weinraub ha contado esta semana en The New York Times que este año habrá entre 12 y 15 películas de más de 100 millones de dólares (13.000 millones de pesetas), asegurando que "nunca se han estrenado tantas películas tan caras en el mismo año" y citando a vario altos ejecutivos de los estudios en pleno ataque de ansiedad por el reto a que están siendo sometidos.27.000 pantallas
No hay tiempo físico en EE UU para ir a ver todo lo que se estrena en el cine. Esta sensación, que invade a cualquier aficionado que lea una revista de cine, es para los medios especializados señal de que puede producirse un colapso de la oferta en cualquier momento. En un país con 27.000 pantallas comerciales de cine, las películas que no arrasan en taquilla el primer fin de semana pasan al olvido y se consideran un fracaso. Esto acaba de ocurrir con una película tan esperada como iMarte ataca!, de Tim Burton.
Las películas que se estrenarán este verano serán visualmente impactantes y algunas incluso ofrecerán un entretenimiento irresistible de acción y destrucción, pero el panorama que simbolizan es descorazonador. Steven Spielberg estrenará la secuela de Parque Jurásico (El mundo perdido), cuyos trailers con complicados efectos de láser sobre el patio de butacas se pueden disfrutar ya en algunas salas selectas de EE UU. Pero este filme, que sólo en publicidad gastará fácilmente 30 millones de dólares (3.900 millones de pesetas), está basado en una pobre secuela literaria carente de interés o novedad respecto al original.
Batman y Robin, la cuarta película del hombre murciélago que se rueda. desde que Tim Burton realizó su peculiar revisión en 1989, también sale dispuesta a batir marcas, entre otras el sueldo de Arnold Schwarzenegger, de quien se dice que cobrará como villano 25 millones de dólares (3.250 millones de pesetas).Más secuelas
Otras importantes inversiones serán Starship Troopers, la película de ciencia ficción del holandés Paul Verhoeven, a estrenar el mismo día que la secuela, ahora a bordo de un barco, del exitazo de acción Speed; la cuarta entrega de Alien, subtitulada Resurrection y protagonizada por Sigourney Weaver y Winona Ryder, y una extraña propuesta fantástica de Barry Sonenfeld titulada Men in black, con Will Smith y Tommy Lee Jones.
El director George Lucas, que, posiblemente sin intención, abrió la presente etapa de la historia de Hollywood en el lejano 1977 con La guerra de las galaxias, va a reestrenar ese clásico a finales del mes de enero, en su 20º aniversario. Habrá nuevo sonido digitalizado y algunas escenas retocadas con ordenador, una labor de reconstrucción que ha costado 10 millones de dólares (1.300 millones de pesetas). Es sólo una muestra de que los efectos digitales han dejado obsoletos los límites económicos y los físicos. El esperadísimo revival es sólo el aperitivo de la nueva trilogía de. las galaxias, que se espera para 1999.
Si cuesta 10 millones de dólares reestrenar una película, ¿qué no se van a gastar los estudios en busca del próximo destrozataquillas? Para Universal, Warner Brothers, Paramount y Fox, que actualmente constituyen el póker de ases de la industria, no hay gasto imposible con tal de atraer a las salas de cine a adolescentes de ambos sexos y jóvenes veinteañeros (su objetivo primordial) de apetito insaciable. Fox y Universal han llegado a emitir contrapublicidad para defender sus respectivas superproducciones de catástrofes volcánicas, Volcano y Dante's Peak. La producción fue una carrera a muerte con vistas al estreno que ganó la Universal por meses de diferencia.
Babelia
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