_
_
_
_

González pide que si se plantea la reforma laboral, sea por consenso

Anabel Díez

Casi todo fueron buenas palabras para lo conseguido por España en el Consejo Europeo de Dublín de los días 13 y 14. Sólo Julio Anguita, de IU, y Francisco Rodríguez, del Bloque Nacionalista Galego, aguaron la fiesta al presidente del Gobierno, José María Aznar, que explicó ayer en el pleno del Congreso los resultados de la cumbre. El secretario general del PSOE, Felipe González, sólo se sintió decepcionado por la débil propuesta sobre empleo, e ironizó en torno a la declaración sobre Cuba. El líder socialista pidió a Aznar que, si va a emprender reformas laborales, que no cuestionó, "no lo haga por decreto sino que intente obtener el consenso social". El presidente del Gobierno no dejó dudas respecto a que habrá tales reformas, al estimar que la actual legislación laboral "es ineficiente" para crear puestos de trabajo.Las más de cuatro horas de debate sirvieron a Aznar para apreciar la amplísima mayoría que tiene en el Congreso su política europea. Joaquim Molins, de CiU, e Iñaki Anasagasti, del PNV, aunque hicieron algunas aportaciones propias para el futuro, mostraron un apoyo claro a lo hecho por el Gabinete de Aznar. Éste escuchó complacido el tono amable que empleaba González al hablar del desarrollo de la Unión Económica y Monetaria, y no pareció contrariado cuando el líder socialista puso objeciones a la "lentitud" en que se desarrolla la reforma del tratado; a la insuficiente propuesta sobre empleo y al "avance moderado" del tercer pilar", referido a Justicia e Interior.

El único asunto en el que González ironizó fue respecto a Cuba, ya que pidió que se comparase la resolución del consejo de diciembre de 1995 con la ahora aprobada. "Para este viaje no se necesitaban tantas alforjas", dijo. Aznar no tenía ganas de pelea, pero quiso dejar claro que en la cumbre sí hubo algo diferente: que se habló de la necesidad de que en la isla haya "una democracia pluralista" y que hay una cláusula suspensiva en la cooperación si se produce una violación grave de los derechos humanos.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Anabel Díez
Es informadora política y parlamentaria en EL PAÍS desde hace tres décadas, con un paso previo en Radio El País. Es premio Carandell y Josefina Carabias a la cronista parlamentaria que otorgan el Senado y el Congreso, respectivamente. Es presidenta de Asociación de Periodistas Parlamentarios (APP).

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_