El precedente del Misisipí
El Proyecto Meddelt, iniciado en 1994, se inspira en la investigación llevada a cabo a lo largo de estas dos últimas décadas en el delta del Misisipí y, en concreto, en los trabajos realizados por el investigador John Day, de Louisiana State University. En este delta, probablemente uno de los mejor estudiados del mundo, se ha detectado que entre un 70% y un 80% de sus humedales pierden elevación y se da un exceso de inundación por parte de aguas marinas, con la consiguiente salinización.Con el tiempo, estos humedales se transforman en lagunas abiertas de las que desaparecen las condiciones para el crecimiento de vegetación. "Simplemente", explica Carles Ibáñez, "se dan condiciones de descomposición de materia orgánica transformándose en zonas de nulo interés natural".
Ibáñez realizó su tesis doctoral en esa universidad norteamericana y de ella se trajo tanto la experiencia como el asesoramiento "a distancia" de John Day. El liderazgo del Laboratorio de Ingeniería Marítima, dirigido por Agustín Sánchez Arcilla, permitió transformar la idea original en un proyecto multinacional en el que participan la universidad de Padua y el Instituto de Ecología Fluvial del CNRS francés, además de otros centros italianos, holandeses y norteamericanos. La suma de todos ellos ha permitido llegar a conclusiones que, en el caso de los deltas, se traducen en la necesidad de restablecer la dinámica natural en los mismos de modo que éstos puedan recibir los sedimentos transportados por los ríos "aprovechando las crecidas periódicas" y "provocando inundaciones moderadas", manteniendo los humedales y protegiendo la presencia de arrozales.
De lo contrario, afirman ambos expertos, "no tardarán en generalizarse procesos de degradación como los que se viven en el Misisipí o en la Camarga francesa".
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