El PP aplaza los decretos del Insalud y farmacias para salvar el consenso político

El órdago lanzado el lunes por la portavoz de sanidad del PSOE, Ángeles Amador, surtió ayer efecto. Ante la amenaza socialista de abandonar la ponencia sanitaria si el Gobierno seguía tomando medidas al margen de la misma, el PP ha decidido aplazar hasta febrero la discusión en el pleno del Congreso, prevista para mañana, de los dos proyectos legislativos sobre reforma del Insalud y de ordenación farmacéutica.La oferta de consenso sigue en pie, aseguró el portavoz de Sanidad del PP, César Víllalón. "No queremos que ningún grupo parlamentario se quede al margen de la reforma de la sanidad. Y en prueba de ello hemos tomado en cuenta la propuesta del PSOE de retrasar la aprobación de los dos proyectos durante un tiempo", explicó.

Con todo, se trata de dos textos que ya están aprobados cómo decretos ley desde junio, y por tanto en vigor, aunque el Parlamento acordó que se tramitaran como proyectos de ley, a fin de mejorarlos. El propósito del aplazamiento, según el PP, es llegar a algún acuerdo sobre las enmiendas presentadas por el PSOE y rechazadas hasta ahora en su trámite parlamentario. ¿De aquí a febrero se pueden negociar los dos decretos", se comprometió Villalón. Ángeles Amador no ha dudado en interpretar esta decisión como un "gesto de buena voluntad" del PP en aras del "respeto" a los trabajos de la ponencia sanitaria, uno de cuyos debates se centra en la reforma organizativa del sistema. "Es una decisión sensata porque estos dos decretos tienen defectos importantes de forma y de fondo y, sobre todo, plantean su incompatibilidad con el trabajo de la ponencia", dijo Amador. "Con éstos se recupera la credibilidad de la ponencia. Es un gesto de prudencia para encontrar un punto de encuentro y de consenso", añadió.

Segundo gesto

El Gobierno tuvo ayer un segundo gesto. Durante su comparecencia en el Congreso, el secretario general de Asistencia Sanitaria, Alberto Núñez Feijoo, anunció que el establecimiento de precios de referencia -cantidad a partir de la cual el paciente paga los fármacos no subvencionados- no se haría hasta que concluyan los trabajos de la ponencia sanitaria. Esta medida, además, tal y como aparece en la Ley de Presupuestos del Estado,está supeditada a la implantación de medicamentos genéricos en el mercado, aún en estudio en el Ministerio de Sanidad.