Pregunta por el botón nuclear

El traspaso del botón nuclear, en el marco del mecanismo, de transferencia de poder durante el periodo de incapacitación de Borís Yeltsin, figuró entre los temas que Kohl abordó ayer con el presidente de Rusia. Sin embargo, el canciller alemán se negó en redondo a entrar en detalles ante la prensa sobre esta cuestión, que calificó de "interna rusa".El destino del mecanismo de control de los arsenales atómicos, que en Rusia es conocido como el maletín nuclear, es objeto de especulaciones en los medios de comunicación, debido a la falta de información pública sobre el tema y a la parquedad de la Constitución respecto a la transferencia de funciones al jefe del Gobierno en caso de incapacidad del presidente.

El mecanismo del maletín nuclear consiste, de hecho, en un sistema de comunicaciones y tres maletines, que están bajo control del presidente, del ministro de Defensa y del jefe del Estado Mayor, respectivamente. Cada uno de estos tres funcionarios posee un código propio conocido sólo por él, y únicamente el conjunto de los tres códigos permitiría dar la orden de activar una carga atómica, según manifestaba ayer el diario, Komersant Daily citando fuentes del Ministerio de Defensa.

Políticos y observadores se han dividido sobre la forma en que debe gestionarse el interinato de Yeltsin. El jefe de la Administración presidencial, Anatoli Chubáis, opinó ayer que Yeltsin no tiene necesidad de transferir el poder inmediatamente, aunque puede delegar en Víktor Chernomirdin brevemente, "durante horas, o días, tal vez un par de días", mientras le operan.

"Yeltsin está en disposición de trabajar normalmente", señaló Chubáis. En un sentido distinto se había expresado el secretario del Consejo de Seguridad, Alexandr Lébed, según el cual Yeltsin debe designar ya a la persona que asume sus responsabilidades durante su enfermedad. Kohl rehuyó ayer comentar las luchas de poder en Moscú, y se limitó a decir que Borís Yeltsin no pertenece a la categoría de quienes se dejan arrebatar el poder.