A tres días del informe presidencial
La dura ofensiva del Ejército Popular Revolucionario (EPR) ocurre a sólo tres días de que el presidente Ernesto Zedillo cumpla con el ritual de la presentación de su informe de Gobierno.Para la ceremonia del 1 de septiembre, el mandatario tenía varios clavos a los que agarrarse, después de que el país estuviera dos años a la deriva: la política de ajuste económico empezaba a dar ciertos resultados, entre ellos la estabilización de los mercados; el diálogo para la transición política había logrado la firma de un acuerdo para la reforma electoral por parte de todos los partidos; el Ejército Zapatista de Liberación Nacional, prácticamente neutralizado con el diálogo de paz, había anunciado su deseo de abandonar las armas...
Y, de nuevo, como cada vez que este país empieza a vislumbrar una etapa de normalización, surge el sobresalto. "¿Quiénes son los que orquestan lo que ya parece ser una bien montada acción desestabilizadora?", se preguntaba ayer el periódico Reforma. "Más que desenmascarar a los que atacan con pasamontañas, hay que desenmascarar a los que arman, financian y organizan este caos". El editorial pedía que se investigue y se dé a conocer "si hay políticos del sistema [de los de ahora o de los de antes] con las manos adentro".
La transparencia informativa ha sido también la principal demanda del conservador Partido de Acción Nacional (PAN). La segunda fuerza del país ha pedido al Gobierno que deje de considerar a la opinión pública mexicana como "menor de edad" y que no pretenda "tranquilizar al país con engaños".
