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Tráfico de mujeres y venta de esposas a domicilio a través de Internet

Más de 40 países usan catálogos cumputerizados

Isabel Ferrer

La industria del sexo se ha adaptado de tal forma a los avances tecnológicos, que la red informática internacional Internet está siendo utilizada para el tráfico de mujeres y la compra de esposas. Según la psicóloga británica Donna Hughes, de la universidad de Bradford, la información sobre las candidatas incluye sus direcciones y números de teléfono -además del peso, altura o medidas- y es obtenida a través de contactos en más de 40 países a través de catálogos computerizados.Los usuarios pueden elegir una candidata entre centenares de mujeres originarias de Filipinas, Costa Rica, Tailandia, Suramérica, India o Europa del Este. Las guías a consultar, similares a las telefónicas pero con fotos a todo color, comprenden precios y las "cualidades" de las elegidas, dispuestas a ejecutar cualquier acto sexual imaginado por el comprador.

Donna Hughes, especialista en estudios sobre la mujer, tropezó el pasado verano con estos servicios por casualidad. Lo que ella quería era recabar datos sobre las violaciones de los derechos de las mujeres. "En su lugar, hallé grupos organizados donde varios varones intercambiaban información sobre prostitutas. También describían lo que habían hecho con ellas", ha dicho. La investigadora pudo leer además mensajes de clientes que aseguraban haber abusado de menores en Tailandia, "incluso con prácticas sádicas".

El servicio no ha dejado ningún cabo suelto. Los interesados en adquirir una esposa sumisa, por ejemplo, no tienen más que solicitarla desde su casa. Los posibles maridos abonan con su tarjeta de crédito la cuenta de un viaje organizado. Un billete de ida y dos asientos de vuelta en el avión rondan el millón de pesetas. Los anuncios de las muchachas disponibles van acompañados de fotos y frases como: "X, alta, delgada y tímida. Sólo ha sido besada una vez". O bien: "S, madre de un niño y dispuesta a todo".

Club de Fornicadores

Uno de los intermediarios de este turismo sexual computerizado ofrece viajes al Caribe por unas 240.000 pesetas. A la salida, desde Nueva York, y la estancia de tres noches en un hotel de tres estrellas, se añade la forma de encontrar prostitutas en la República Dominicana.El viajero también puede hacerse miembro del Club de los Fornicadores, que ofrece visitas gratis y precios muy "razonables". Otro proveedor explica al primerizo cómo comportarse en un burdel, conquistar a una mujer allí y pagar la cuenta antes de salir.

Hughes ha indicado que posee datos de una organización australiana utilizada para la compra de esposas. "Una vez casados el comprador se la lleva a casa. Luego, puede abandonarla, sin dinero, y volver a por otra".

Con más de 25 millones de usuarios en todo el mundo, las posibilidades de la red Internet han sobrepasado la legislación de buena parte de los países que más la utilizan.

La psicóloga británica calcula que la reciente inclusión en la misma de imágenes y sonido ha favorecido la explosión de este remozado mercado del sexo. Su trabajo será utilizado ahora por la Coalición contra el Tráfico de Mujeres, a la que pertenece. Esta organización no gubernamental, dependiente de Naciones Unidas, espera apoyar así la aprobación de leyes especiales para prevenir la explotación sexual.

Virginia Bottomley, ministra británica de Cultura, quiere prohibir la pornografía en televisión, y ha anunciado que intentará paralizar las transmisiones en el Reino Unido del satélite sueco TVErótica, que sirve "sexo sin inhibiciones". Pero hacer algo similar con Internet puede resultarle mucho más dificil.

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