La innovación europea necesita un cambio

El escenario de la innovación en Europa es tan deficiente que necesita un cambio radical, según un grupo de expertos convocados por el programa europeo de innovación Eureka, con motivo de su décimo aniversario. Con su informe, los expertos dan un suspenso a los sucesivos y, en su opinión, fragmentados esfuerzos para aumentar la competitividad europea en tecnologías avanzadas y echan en falta la definición de grandes objetivos estratégicos en los que concentrar los recursos económicos."La industria europea ha perdido terreno respecto a sus competidores, en particular en las áreas de alta tecnología. Está claro que la respuesta europea, a través de los programas de la UE o de Eureka, no ha alcanzado el nivel requerido por este desafío globaI", explican los expertos, liderados por el vizconde belga Davignon.

"Más de lo mismo no es suficiente", resumen los expertos. "Existen demasiados foros de toma de decisiones, en los que no están todos los actores que contribuyen al proceso de innovación, lo que resulta en una distribución no óptima de los escasos recursos".

Identificar las áreas en las que Europa es fuerte y trabajar sobre ellas en vez de intentar corregir las debilidades es otra recomendación de los expertos, entre los que no figura ninguno español, a pesar de los esfuerzos del Gobierno español por situar alguno. La multiplicidad de marcos para la innovación tecnológica y especialmente la duplicidad entre Eureka y los programas tecnológicos de la UE son también criticados por los expertos, así como la falta de inversores privados en compañías de alto riesgo (venture capital).

Cerca del mercado

Este informe refleja la obsesión de los implicados en investigación y desarrollo en Europa por trabajar en áreas aplicadas que den lugar a productos que además lleguen al mercado. Uno de los instrumentos actuales es el programa Eureka, nacido en 1985 por iniciativa del presidente francés Mitterrand para contrarrestar en el campo civil la iniciativa de la guerra de las galaxias del presidente estadounidense Reagan. Lo que empezó como un gran programa para estimular con un mecanismo de abajo arriba proyectos estratégicos para Europa, se ha convertido en un programa de proyectos cada vez menos ambiciosos -en tiempo y en dinero- que, sin embargo, ha permitido a muchas pequeñas empresas, poco acostumbradas a innovar, colaborar con empresas de otros países bajo un paraguas común. Además, ha sido un instrumento de apertura a Europa del Este y Rusia, y en la actualidad participan 24 países. El mecanismo es sencillo: al menos dos empresas o centros de investigación de al menos dos países, se unen en un proyecto común innovador que solicita la etiqueta Eureka y tiene acceso a financiación oficial.Lo que algunos ven como un fracaso de esta iniciativa estratégica, otros lo ven como un éxito, aunque más de andar por casa. En todo caso, el programa Eureka, que cumplió 10 años la pasada semana en Bruselas no va a desaparecer. La ausencia de grandes proyectos estratégicos, a excepción prácticamente del nuevo programa Medea de microelectrónica, y los intentos por acaparar fondos del IV Programa Marco de Investigación y Desarrollo de la UE por parte de Francia y Alemania, con la oposición del Reino Unido y otros países de menor peso, fueron algunos de los temas de la reunión.

Tras esta conferencia ministerial (a la que asistieron pocos ministros, ya que Eureka ha perdido en estos 10 años relevancia política) existen en marcha 718 proyectos Eureka, con una inversión total de 11.386 millones de ecu (1,8 billones de pesetas), aunque esta cifra incluye Medea (2.000 millones de ecu).

España participa en 31 (y lidera 17) de los 160 nuevos proyectos a los que se ha concedido este año la etiqueta Eureka, con una inversión cercana a los 6.000 millones de pesetas. Por áreas, el mayor número de proyectos se refiere a biotecnología (un cajón de sastre en el que entran proyectos agroalimentarlos y de medicina, entre otros) seguida de informática, robótica, medio ambiente y materiales.

Los proyectos Eureka que solicitan financiación pública en España pueden obtener créditos de interés nulo a través del Centro para el Desarrollo Tecnológico e Industrial (CDTI), dependiente del ministerio de Industria, por una cantidad equivalente al 50% de su presupuesto, o subvenciones del citado ministerio. Ejemplos de proyectos presentados: desarrollar una plataforma abierta PC y un interfaz amigable con el estándar Unix, la producción de huevos y carne con altos niveles de ácidos grasos poliinsaturados de cadena larga, desarrollar un sistema interactivo para medir los índices de audiencia en las cadenas de television y establecer una red de información geográfica en la región turca del Mármara.