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Críticas socialistas a la ausencia de Aznar en el primer debate del Senado

LUIS R. AIZPEOLEA / JAVIER CASQUEIRO El arranque, hoy, de la legislatura en el Senado ofrece una de cal y otra de arena. La primera es que su presidente, Juan Ignacio Barrero, ha convocado este fin de semana, en Mérida, a todos los presidentes de los Parlamentos autonómicos. La segunda, viene de un incumplimiento. Barrero prometió la pasada semana que el presidente del Gobierno, José María Aznar, y su equipo comparecerían en el primer pleno. Esta presencia no será posible, lo que ha desatado las críticas del PSOE. El PP sí quiere replantearse en esta legislatura el sentido de la Cámara alta con variadas citas autonómicas y con el Consejo de Política Fiscal y Financiera.

Barrero justificó ayer la ausencia de Aznar del primer pleno por problemas de agenda, según le aseguraron en La Moncloa. El presidente del Senado añadió que Aznar sí comparecerá más adelante.La iniciativa de Barrero de convocar el próximo fin se semana, en Mérida, a los presidentes de los Parlamentos autonómicos -reunión que tiene precedentes en la presidencia del Senado del socialista Federico Carvajal- servirá para poner en común los problemas de las 17 Cámaras. En las comunidades autónomas reguladas por el artículo 151 de la Constitución se reúnen los parlamentarios a lo largo de todo el año y cobran sueldos normales. En las del 143 las convocatorias son muy esporádicas y los diputados sólo perciben dietas.

Barrero confirmó su ofrecimiento a los presidentes autonómicos para habilitarles un (despacho en el Senado, idea bien vista por el portavoz socialista y anterior presidente de la Cámara Juan José Laborda, que la tanteó en su mandato,

El incumplimiento de que Aznar y su equipo comparecerían en la primera sesión del Senado, sin embargo, ha dado pie a una severa crítica de los socia, listas. Laborda manifestó ayer que "se rompe la tradición de que el Gobierno en pleno, recién constituido, asista a la primera sesión plenaria del Senado" . En diciembre de 1982, el Ejecutivo socialista sí acudió y Felipe González expuso su programa de actuación y abrió un debate entre los senadores.

A juicio de Laborda, la razón de fondo de la incomparecencia de Aznar es que no quiere debatir, y adelantó que presentará una serie de interpelaciones para llenar el vacío de la incomparecencia del nuevo presidente del Gobierno.

El PP, por su parte, también intentará contrarrestar ese vacío con sus propias interpelaciones, pero en el pleno siguiente. Fuentes del grupo popular apuntaron que en 1982 el PSOE -que también gobernaba y era mayoría en la Cámara- tardó cinco meses en tramitar su primera iniciativa en el Senado. El PP ha preparado ya propuestas para llenar su Cupo de consultas, pero con la intención de dar cobertura al Ejecutivo.

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Las cuestiones a las que se refiere, sin embargo, el portavoz del PSOE se ceñirán a los, planes autonómicos expuestos por Aznar durante el debate de su investidura presidencial y a los pactos firmados con los nacionalistas. Preguntará por el alcance de la financiación autonómica pactada entre aquéllos y el PP; sobre la promesa de descentralizar competencias de las comunidades hacia los ayuntamientos y sobre el futuro del Senado como Cámara de las autonomías.

El portavoz del PP, Pío García Escudero, reiteró a este periódico que los populares mantienen su compromiso de intentar la transformación del Senado en Cámara territorial a través de una reforma constitucional: "O hacemos la reforma esta legislatura, en que se dan todas las condiciones, o suprimimos el Senado".

En este sentido, el secretario del PP, Alfredo Prada, avanzó algunas propuestas que su grupo sostendrá en esta legislatura para aumentar la función territorial del Senado. El PP está negociando estos días con varios de sus compañeros en el Ejecutivo comparecencias para justificar esa nueva imagen. Una de las más importantes podría ser la convocatoria en el Senado del Consejo de Política Fiscal y Financiera en el que los representantes de las 17 autonomías discutirán con el Ministerio de Economía el nuevo sistema de coresponsabilidad fiscal.

Portavoces del PP en el Senado también han conversado con el nuevo ministro de Administraciones Públicas, Mariano Rajoy, para que exponga las líneas. generales de su programa de gobierno antes en la Cámara alta que en el Congreso. El PP se muestra empeñado en retomar, probablemente este otoño, los debates sobre el estado de las autonomías relegados al olvido desde que se celebró el último entre los días 26 y 28 de septiembre de 1994. Y aguardan la asistencia, por primera vez, del lehendakari José Antonio Ardanza, ausente en anteriores ediciones.

'Regalos' a la oposición

El Partido Popular dispone de mayoría absoluta en la Cámara alta, pero el escenario político general de pactos y la nueva imagen de diálogo que se pretende transmitir han facilitado la cesión de la presidencia de cuatro comisiones a representantes de partidos teóricamente en la oposición.Así ha sucedido con la de Obras Públicas, en la que estaba muy interesada Convergència i Unió y que presidirá su senador Vicent Beguer, y con la de Agricultura, que había solicitado el Partido Nacionalista Vasco y que, finalmente, encabezará su senador Ricardo Gatzagaetxebarria. CiU y PNV son socios en la sombra del Gobierno de José María Aznar.

Además, el PP ha ofrecido al PSOE presidir dos comisiones, la tradicional de Presupuestos, de la que se ocupará el ex ministro de Administraciones Públicas Joan Lerma, y la que controla las Peticiones que llegan a la Cámara, que regulará Carmen Granado.

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